Ir al contenido principal

Capítulo veintidós.




Abrí mis ojos de par en par al tocar una cabeza completamente rapada, la oscuridad inundaba la habitación, pero no hacía falta verlo, podía deducir fácilmente de quien se trataba.
–O…wen… –musité con un ápice de duda mientras me apartaba lentamente.
–Danbi yo… yo… –aclaró su garganta sonoramente confirmando mi duda. Era Owen.
Inhalé aire sonoramente y me aparté rápidamente de él, estaba demasiado sorprendida como para articular palabra alguna, pude escuchar pasos y pronto la luz de la habitación se encendió.
–Esto… –titubeó él regresando hacia mí haciendo ademanes con sus manos como es su costumbre al explicarse nerviosamente–, tú me jalaste y me besaste y yo… no quería, pero…
–¿Por qué estás en esta habitación Owen? –cuestioné finalmente.
–Yo venía a despertarte para que tomaras tu medicina.
–¡¿Y porque me dijiste “bambi”?! –arrugué mi ceño.
Él sonrió ligeramente pero no dejaba su expresión de culpabilidad y terror.
–Es que… me pareció que ese apodo suena… algo… ¿bonito? –se acercó a la cama manteniendo su mirada al piso rascando su nuca torpemente–. Entonces quería intentar decirlo… y… bueno… –aclaró su garganta–. ¿Pensaste que yo era Bloo?
–¡Si! –yo estaba molesta.
–¿Y porque besarías a Bloo? –finalmente me miró a los ojos.
–Porque… –evité su mirada–, emh… –fruncí un mohín–, bueno… él y yo… –apreté mis labios mugiendo levemente como si fuera una vaca. No lograba encontrar una explicación.
–Está bien si no quieres darme una explicación no tienes que hacerlo. Tomate tu medicina y duerme.
Owen salió de la habitación tan rápido que no pude pronunciar palabra, aunque no es que tuviera algo por decir. ¿Qué iba a explicar? ¿“Beso a Bloo porque me excita demasiado y lo deseo”? Esa es la única y verdadera razón, pero no se lo iba a decir a “mi bro” sospecho que no iba a gustarle esa respuesta y aunque normalmente no me interesa lo que los demás piensen de mí, “mi bro” es especial y lo último que deseo es que se moleste conmigo.
Estiré mi mano hasta el velador junto a la cama para tomar el vaso con agua y tragué las pastillas que comedidamente Owen había dejado preparadas en un pequeño plato, volví a recostarme, pero la luz estaba encendida y la puerta abierta, solté un quejido ya que tenía demasiada pereza para levantarme, pero lo hice, caminé dando brinquitos apoyada en una sola muleta hasta el interruptor junto a la puerta, apagué la luz y me disponía cerrar la puerta, pero escuché voces.
Uno de mis peores defectos es la curiosidad, no podía simplemente ignorar las voces y ya que la curiosidad mató al gato no a bambi, me dirigí hasta la habitación de donde provenían las voces, me recargué hacia la pared y escuché atentamente.
–¿Qué te pasa Owen? –cuestionó Bloo somnoliento.
–¡Responde lo que pregunté!
–¿Por qué demonios estas gritándome? –gruñó Bloo, pero no sonaba del todo molesto.
–¡No evadas el tema y responde ya!
–Oye… –la voz grave de Bloo cambió drásticamente y me causó un escalofrío, esta vez sí parecía realmente molesto–. Primero me despiertas sacudiéndome como si yo fuera un trapo y después empiezas a preguntar cosas que no comprendo.
–No hagas que me enfade más Daniel… –Owen sonaba irritado, como si estuviera intentando contener sus gritos–. ¡Responde la maldita pregunta!
–¡AHH! ¡Estoy lastimado idiota!
Escuché un golpe seco y sumado a la queja de Bloo imaginé que… ¿Owen lo había golpeado?
–Habla o voy a golpearte en serio.
–¿Qué te pasa? Estás actuando como un novio celoso… –Bloo empezó a reír–. ¿Es eso? ¿Estás celoso?
–Por supuesto que no.
–Pues estás actuando como si lo estuvieras.
–Dije que no. Solo quiero saber que pasó entre Danbi y tú.
–¿Y porque no se lo preguntas a ella?
–Porque ella no quiere decírmelo.
–¿Entonces vienes a preguntarme con agresiones? Si eso no es estar celoso ¿Qué es?
–No estoy celoso. Te hablé mucho de ella, la consideraba mi hermanita y ahora que la he encontrado…
–Evidentemente bambi empezó a gustarte, ella ya no es una niña, es una mujer.
–Te equivocas. Quería a Danbi como si fuera mi hermanita y aún la quiero de esa forma, me pongo así porque no quiero que la lastimes.
–¿Qué? ¿Yo? –Bloo carcajeó.
–Tu aún no has superado a tu ex.
–¡¿Y qué tiene que ver eso?! –Bloo gritó.
–Que te has involucrado con tantas mujeres que seguramente has perdido la cuenta y tan solo por despecho. No quiero que Danbi sea una de aquellas y que después venga aquí llorando buscándote pidiendo que no la dejes.
–Oye… ¿Qué cosas dices…?
–¡Lo eh visto Daniel!
–¿Y tú no? También te involucras con muchas chicas ¡No vengas a hacerte el santo conmigo!
–¡De acuerdo! También hago lo mío, pero no las ilusiono en vano como lo haces tú. Primero las enamoras y después las tratas como si fueran basura. ¿Acaso crees que tratándolas como tu ex novia te trató a ti vas a poder sanar tus propias heridas? ¡Te tengo noticias Daniel! No funciona de esa forma.
–¡¿Y qué sabes tú acerca de lo que yo siento?!
–Te conozco demasiado y por un tiempo quise comprender lo que sentías así que no dije nada al verte jugar de esa forma con las mujeres, pero ahora se trata de alguien que me importa y no voy a dejar que la lastimes.
–¡Tú no sabes nada! ¡Déjame en paz!
–Te dejaré en paz cuando te alejes de Danbi.
–¿Están filmando un drama? –cuestioné sarcástica asomándome por la puerta. No podía seguir ocultándome para escuchar.
–Danbi… –musitó Owen al verme–. ¿Qué haces aquí…?
–No podía seguir escuchando semejante drama.
–Escucha Danbi… –Owen se disponía a explicar, pero tuve que interrumpirlo.
–No. Escucha tú bro –sonreí al usar el sobrenombre que el mismo me dio–. Hay algo entre nosotros –señalé ligeramente a Bloo–, pero no es como si estuviera perdidamente enamorada de él.
–¿No? –Bloo me miró–. Ay que dolor… rompes mi corazón bambi –fingió estar afligido y luego rió.
No pude evitar sonreír también porque el acto había sido gracioso, pero Owen me miraba con tanta seriedad que mi sonrisa se borró drásticamente, me sentí ligeramente intimidada.
–Danbi –Owen se puso de pie y caminó hacia mí–, no quiero que vuelvas a molestarte porque me entrometo en tu vida, pero…
 –Con respecto a eso… –titubeé ya que le debía una mejor disculpa y en algún momento tenía que dársela–. Lamento haberte gritado el otro día. Es solo que estoy acostumbrada a arreglármelas sola y cuando preguntabas tanto solo me frustré y te traté mal, pero… sinceramente agradezco que me cuides como un hermano mayor.
Tuve que aclarar mi garganta estrepitosamente para disimular mi incomodidad ya que no se me dan bien las cosas cursis, pero aquí estoy; pidiendo disculpas y dando gracias doblegando mi orgullo. Los sacrificios que tengo que hacer por este bro.
–Está bien –Owen sonrió dulcemente, se notaba lo complacido que estaba con mi disculpa–, no tienes que disculparte de nuevo por eso, ya pasó.
–Si tenía que disculparme correctamente y agradecerte –sonreí ligeramente avergonzada pero aún tenía más por decir así que intenté ponerme lo más seria y firme posible–. Pero ya soy grandecita y tengo… necesidades ¿entiendes bro?
–¿Necesidades? –cuestionó Owen.
–Biológicas… –agregué otra pista.
–¿Qué necesi…dades… biolo…?
Bloo empezó a reír a carcajadas, al parecer el si había entendido y yo no pude evitar sonrojarme, podía sentir mis mejillas ardiendo, bajé mi mirada al piso apretando mis labios esperando que Owen entendiera.
–Te daré una pista más clara –intervino Bloo casi llorando por tanto reír–. La palabra empieza con sex y termina con o.
–¡Oh..! ¡De acuerdo! –Owen rió nervioso al comprender, todo su rostro se tornó rojizo y tosió extrañamente para luego aclarar su garganta–. Bien… pero –me miró suplicante–, ¿no hay alguien que no sea Bloo para… saciar esas necesidades? ¿Por qué él?
–¡Oye! –reclamó Bloo con su rostro fruncido en una mueca–. ¿Por qué no conmigo?
–Porque tú eres mi amigo, mi hermano, mi bro… y ella es mi hermana mi bro… ¡Sería incesto!
–¿Fumaste algo? –cuestionó Bloo manteniendo su mueca.
–No fumé nada y no se les ocurra… –Owen hizo una mueca de asco mientras nos señalaba uno a uno a Bloo y a mí–. ¡No lo hagan! Hay miles de personas en el mundo, no puede ser entre ustedes dos. ¡Prometan que no lo van a hacer!
–Yo no prometo nada –dijo Bloo sonriendo lujurioso mientras me analizaba de pies a cabeza–. Y ahora que Owen lo sabe. Bambi –palmeó el lugar junto a él en la cama–. ¿Porque no te quedas a dormir conmigo?
–¡Vas a hacer que me moleste en serio Daniel! –Advirtió Owen y me cargó rápidamente como si yo fuera un monigote.
–Oye… –reclamé mientras era llevada y escuchaba la estrepitosa risa de Bloo a lo lejos– ¿qué haces?
–Te llevo lejos de ese pervertido –respondió Owen al soltarme sobre la cama.
Contuve mi risa mirando su rostro sonrojado mientras me arropaba con la manta y murmuraba lo suficientemente alto para que yo lo escuchara.
–No me meteré en tu vida… sexual…
–Bro –interrumpí, pero no pude decir mucho ya que el continuó con su sermón.
–Serás muy adulta y lo que quieras, pero no en mi casa señorita –intentó lucir serio pero una ligera sonrisa amenazaba con salir de la comisura de su boca–. Mi techo, mis reglas. Siempre quise decir eso –carcajeó.
–Pero no es tu casa, es de Bloo.
–Pero yo… yo… –se quedó sin palabras y suspiró rindiéndose–. Creo que ya escuchaste bastante de mi platica con Bloo, pero quiero agregar algo.
–¿Qué?
–Él es uno de mis mejores amigos y lo aprecio demasiado, pero en este momento no es la mejor versión de sí mismo así que por favor… no te involucres emocionalmente con él. Por lo menos hasta que supere sus propios problemas. ¿De acuerdo? –pidió con una mirada suplicante.
–Está bien –accedí ya que; dijo “emocionalmente” no “corporalmente” así que no es difícil, después de todo, sexo es lo único que me interesa de Bloo por el momento.
Owen sonrió complacido y acarició mi cabeza.
–De acuerdo… ahora vuelve a dormir.
–Tú también ve a dormir –me giré acurrucándome y cerrando los ojos.
–Lo haré pequeña –se levantó y caminó hasta la puerta para apagar la luz– Descansa.
---
Después de una noche de revelaciones, nos sentamos los tres a la misma mesa para desayunar algo de cereal y leche mientras escuchamos música y platicamos.    
La calmada atmosfera no tardó en ser interrumpida por la aguda e inconfundible risa de Loopy, tras el moreno risueño aparecieron Nafla y West.
Me alegraba tanto de haberme vestido, hubiera sido demasiado vergonzoso que me vieran en pijama, aunque seguramente luzco muy desaliñada hoy; mi cabello estaba enmarañado en un moño y no llevaba una gota de maquillaje, pero por lo menos mis enormes lentes cubrían parcialmente mi rostro.
–¡Yummyy! –exclamó Loopy aproximándose al plato de Owen para robar su cuchara y darle un gran bocado al cereal remojado en leche.
–¡Toma tu propio plato con cereal! –reclamó Owen, pero sin hacer nada por detener a Loopy de tomar otro bocado y luego los dos sonrieron para hacer un choque de manos amistoso saludándose.
Nafla y West también saludaron y ahora incluso yo hacía un choque de puños con aquellos alborotadores y risueños sujetos.
Loopy atacaba el refrigerador sacando una y otra cosa mientras tarareaba la palabra “sándwich” una y otra y otra vez. West se había sentado a la mesa intentando abrir un gran paquete de galletas con una sola mano y sus dientes.
–Bloo, trae vasos –pidió Nafla mientras abría cuidadosamente una botella de coca-cola también traída por ellos.
Owen le dio los últimos bocados a su plato de cereal y acudió junto a Loopy para ayudarlo.
Yo no podía evitar mirarlos con una ligera sonrisa, todos trabajaban en perfecta sincronía, era como si fuera su rutina diaria el desayunar juntos.
–El primer vaso es para la pequeña bambi… –canturreó Nafla mientras servía el primer vaso que Bloo sujetaba.
–¿Disculpa? –cuestioné algo sorprendida.
–¿Qué? –el pelirrojo me miró sonriente por un segundo y regresó su atención al vaso.
–¿Qué acabas de decir?  –insistí.
–El primer vaso es para la pequeña Danbi –repitió él simple y sonriente terminando de llenar el vaso con coca-cola.
–No no –alegué mientras tomaba el vaso que Bloo me ofrecía, pero sin quitar mi mirada del pelirrojo–, dijiste “bambi”
–¿Qué? –Nafla luchaba por no reír mientras servía otro vaso–. Claro que no, dije; Danbi. Así te llamas, ¿no?
–Sí, Danbi con D de dedo y N intermedia, pero tu dijiste “bambi” con B y M.
Todos reían ante mi infantil reclamo y Nafla no podía contener su risa, estaba claro que me había dicho “bambi” deliberadamente.
–Ag… como sea –me di por vencida y le di un sorbo al vaso mientras miraba fijamente a Bloo quien estaba sentado a mi lado.
–¿Qué? –cuestionó Bloo mientras también le daba un sorbo a su vaso.
–Es por tu culpa –le hice una mueca frunciendo mis labios y poniendo en blanco mis ojos.
Bloo carcajeó casi atragantándose con la coca-cola y lucho por hablar.
–¿Te han… dicho que te ves muy fea cuando haces muecas? –cuestionó él tratando de no reír para tomar otro bocado de su vaso.
–La verdad… si me lo han dicho –reí con mi propia respuesta. En realidad, nunca me lo han dicho, pero me imagino que cualquiera se vería feo si hace muecas de desagrado.
–Pues te mintieron –Agregó Owen apareciendo sin previo aviso junto a mí para dejar un plato con un sándwich en la mesa y luego pellizco mi mejilla–. No luces fea, eres muy linda. Come el sándwich –guiñó un ojo y dejó mi mejilla para luego irse así sin más.
Quedé literalmente boquiabierta. Mi corazón empezaba a golpetear incesante mi tórax, ¿cómo podía no inmutarme ante tan coqueta acción…? un momento. ¿Coqueta? No no, estoy segura de que esa no fue una acción coqueta en absoluto, mi bro es así de… cariñoso conmigo, como todo hermano mayor lo sería.
Tomé otro sorbo para quitarme tontos pensamientos de la mente, dejé el vaso en la mesa y tomé el sándwich para darle un mordisco.
–Te gusta Owen –susurró Bloo a mi oído y luego sonrió ladino.
Me quedé congelada con mi boca a medio mordisco en el pan y regresé mi mirada hacia Bloo.
–No te preocupes, no se lo diré –levantó su ceja en una expresión malévola–. O tal vez si se lo diga.
–¡Mo ez zierdo! –reclamé con mi boca llena.
–¿Qué?  –cuestionó Bloo entre risas.
Me torturé a mí misma para masticar y tragar tan rápido como pude.
–¡No es cierto! –repetí.
–¿Qué cosa no es cierta? –cuestionó Loopy mientras caminaba hacia la mesa con dos platos en sus manos.
–Que a bambi le gusta O…
Bloo no pudo terminar su oración ya que le metí su propio sándwich en la boca para callarlo.
–La mostaza… –corregí para Loopy mientras veía a Owen venir también con dos platos hacia la mesa–. Bloo dice que me gusta la mostaza en el sándwich, pero no es cierto.
–¿No te gusta? –cuestionó Owen ajeno completamente a la plática y le entregó un plato a West.
–Pero no le pusimos mostaza –agregó Loopy serio y sinceramente preocupado–. ¿No te gustó el sándwich?
–Ah… –sonreí avergonzada–. Claro que me gustó el sándwich, está delicioso, es solo que Bloo dice tonterías… –le di otra mordida al pan para demostrar lo mucho que me había gustado.
–Ella se esfuerza en decir que no le gusta, pero yo noto que le gusta, y mucho –mencionó Bloo con una sonrisa malévola–. Me refiero a la mostaza claro está.
–Deja de decir tonterías Bloo –reclamó Loopy negando con su cabeza–, si ella dice que no le gusta no le gusta y punto. No la molestes y come tu desayuno rápido que tenemos trabajo que hacer.
–¿Trabajo? –cuestioné, pero no esperé una respuesta y pregunté de nuevo–. ¿Qué día es hoy?
–Lunes –respondió West como si fuera lo más obvio.
–¡No puede ser! –exclamé.
–¿Qué pasa? –cuestionó Owen preocupado.
–Tengo que ir a clases. ¿Qué hora es? –saqué mi teléfono del bolsillo de mi sudadera.
¡No puede ser! Entre tanta fiesta y tragedia había perdido la noción del tiempo, es lunes y yo ya debería estar preparándome para ir a la universidad.  
–Pero estás lastimada… –mencionó West con un puchero–. Falta a clases.
–Por supuesto que no, tengo una beca que mantener –expliqué mientras me ponía de pie apoyándome en las muletas.
 –¿Una beca? –cuestionaron todos al unísono.
–Si… una beca, ya saben…
–Yo no sé de qué hablas –articuló Nafla confundido–. ¿No estás en la universidad estatal? ¿Qué no es gratuita?
–Lo es, pero hay que comprar libros, materiales, manutención etc. y la beca consta en apoyo económico del gobierno para esos gastos. ¿Nunca escucharon al respecto?
–La verdad no –Loopy rió despistado.
–Yo tampoco… –Owen sonrió–. Mis padres pagaron mi universidad.
–Pues que suerte bro, pero yo no tengo esa ayuda así que debo mantener mis notas altas si quiero seguir recibiendo el dinero de la beca.  
–Oh~ –canturreó Bloo–. Nuestra Bambi es un cerebrito –y se puso de pie–. Vamos Owen, date prisa y aséate que tenemos que llevarla a la universidad.
–¿Tenemos? –cuestionó Owen con una ceja altiva.
–Sí, ¿no puedo acompañar a mi bambi?
–No es “tu” bambi –respondió Owen secamente–. Y aléjate de ella.
–Eyy… –West sonrió mirando nervioso a Owen y Bloo–. ¿Qué está pasando aquí?
Loopy interrumpió el momento de tensión dando un golpe a la mesa con ambas palmas de sus manos y se puso de pie regañando a Bloo y Owen firme pero sonriente.
–Niños niños. Dejen las peleas para después, Danbi tiene que prepararse para ir a la universidad y nosotros que trabajar así que andando andando –el moreno dio palmaditas y todos se levantaron de su sitio para empezar a recoger los platos.
–No vas a ir con nosotros –Agregó rebeldemente Owen mientras caminaba fuera de la cocina ayudándome a caminar sujetándome por la cintura.
–¿Olvidas que es mi auto el que vas a conducir? –le recordó Bloo mientras nos seguía.
Owen se detuvo en seco al llegar al pasillo y aniquiló a Bloo con la mirada, no podía decir nada ante tal verdad, no le quedaba más remedio que dejar que Bloo fuera con nosotros, quitó de mis manos las muletas, se las entregó a Bloo y dio la vuelta para que yo subiera a su espalda.
–¿Puedes ducharte sola? ¿Estás segura? –cuestionó Owen al llegar a la habitación y me bajó con cuidado a la cama.
–Me las arreglaré bro, ¿o pretendes entrar a la ducha conmigo?
–¡No! –la voz de Owen se tornó un hilo y lucia ruborizado–. Claro que no….
No pude evitar reírme ante la tímida reacción de Owen, pero para tranquilizarlo le expliqué:
–Puedo sacar la venda para darme una ducha rápida, no es un yeso, ya vete y ayuda a Bloo que el si necesita tu ayuda.
–No voy a ayudar a ese pervertido.
–Ve y ayúdalo –pedí con un tono dulce en mi voz. Cosa que me sorprendió bastante ya que no soy de ese tipo cursi que habla como bebé y nasalmente.
–Si si, iré, pero llámame enseguida si necesitas ayuda.
–Estaré bien.
–Voy a ponerle el seguro a la puerta –me avisó él mientras ponía el seguro–. Hay demasiados hombres en esta casa.
–De acuerdo –respondí sonriente.
Quité la venda del pie y la ropa a prisa para luego ir al cuarto de baño, me di una ducha rápida y salí del cuarto de baño envuelta en una toalla, me maquillé lo más rápido que jamás eh hecho y me puse ropa interior, luego revolví toda la ropa en mi maleta buscando unos pantalones capri, pero no había ninguno, tuve que ponerme una falda short color blanco que me llega un poco más arriba de las rodillas y un buzo de cuello alto sin mangas color mostaza. Revolví una vez más la maleta en busca de mi chaqueta de jean, pero solo tenía sudaderas, maldije en voz baja por no haberla guardado en la maleta.
Desenredé la toalla de mi cabello y escuché golpecitos en la puerta, di brincos en un pie hasta llegar a la puerta y la abrí.
–¿Ya estás lista? –se trataba de Owen, su cabeza brillaba, parecía que la había pulido.
–¿Qué? –cuestionó él entrando en la habitación.
–Tu cabeza… –señalé burlona–, brilla tanto…
–Y tu cabeza parece un nido de pájaros –contra atacó él causando que yo riera y perdiera el equilibrio ya que no había usado mis muletas.
–¡Cuidado! –él acudió rápidamente tomándome por la cintura para que no cayera–. Usa las muletas, tontita…
Como acto reflejo me había sujetado a su cuello y mi sonrisa se borró drásticamente al tenerlo tan cerca.


Seguir leyendo

Comentarios

Entradas populares de este blog

Inevitablemente enamorada de Jae Beom (Jay Park) Esta historia es la continuación de <El sueño de una fan en AOMG>  como lo prometí, haré una historia diferente para cada uno de los bellos oppas de AOMG. En esta historia la protagonista se queda con Jay. Datos de esta fic: Genero:     Romance ​ Protagonista:      Tú (en la linea ___ coloca tu nombre) ​ Personajes principales:      Jay Park ​ Contenido adulto  (escenas de sexo) :    50% ​ Numero de capitulos:     ​ Estado de la fic:     En proceso ​ Autor:    GabyO ​ Contactate con el/la autor/a:     @gabyo66 en instagram *** I M P O R T A N T E ***                                 ...

Capitulo 1

· ¡Suéltame idiota!  -Le gritaba mientras luchaba por liberar mis muñecas de sus fuertes y grandes manos- · Sabes que te gusto, porque sigues negándolo  -dijo él con esa sonrisa prepotente de galán que tanto odio- Esta respirando agitadamente sobre mi cuello, ¿pretende besarme? ¿Por qué recorre con su cálido aliento mi piel haciéndome estremecer? No estoy diciendo que me guste, son las hormonas, él es un hombre tan sexy, quien podría no notarlo, que mujer no lo desea, pero… quien se cree que es este idiota para forzarme a hacer algo que no quiero… si ya me desagradaba un poco, creo que ahora lo odio, él ya no es la persona que solía conocer. Te estarás preguntando; ¿Cómo es que llegamos a esta situación?, pues te lo contare todo poco a poco. Para empezar, mi nombre es ChaeRi, Song-Chae-Ri, mis amigas/os me dicen Cherry (cereza, en español) por el color de mis labios, me han llamado así desde que tengo memoria, siempre digo que no recuerdo la primera vez que re...

Capítulo 53: ¡Te quiero!

JiHo se detiene al escucharla pero vuelve a dar otro paso -¡Dije que te quiero!  -vuelve a gritar JiHo se detiene pero no se gira, esta triste, aunque ella ha dicho que lo quiere por alguna razón no se siente como esperaba que lo sentiría, está demasiado enfadado, DJ se acerca a él y lo toma de la mano que sujeta la maleta, se la quita y toma su mano. -No te vayas  -se lo pide una vez más JiHo permanece en silencio mirando al piso, ella lo lleva de la mano hasta la cama -Quítate el pantalón, ponte ese de pijama para que no presione en tu herida Es solo DJ quien continua hablando, lo ayuda a cambiarse al pantalón de pijama y lo recuesta en la cama, la mente de JiHo está llena de pensamientos y confusión: “¿Porque no estoy contento? Me ha dicho que me quiere pero… ¿Por qué esto me duele en lugar de ponerme feliz?... siento que lo dijo solo por obligación… porque yo  la manipule para que lo dijera…” -JiHo JiHo, oye   -DJ lo llama,...