-¿Cómo es que… que tuviste fuerzas para subirme a la cama si ayer apenas podías mantenerte de pie? ¿Estabas fingiendo? -enfadada -No nena, no estaba fingiendo pero tu cuidado hizo que me repusiera pronto -ladea su cabeza y baja hasta su cuello -Pues ahora que te sientes mejor, vete… -un ligero gemido escapa de su boca al sentirlo respirando tan cerca de su cuello -¿Quieres que me vaya? -sus masculinas manos la acarician -Si… -casi derritiéndose en sus manos -¿Estas segura? -finalmente ataca el femenino cuello besándolo con desbordante pasión -No… -gime JiHo la toma por los glúteos para subirla y besar más cómodamente su cuello, ella se aferra a él con piernas y brazos, su cuerpo se estremece ante las caricias y succiones que la boca de JiHo le proporciona, su conciencia se mantiene diciéndole “No te dejes convencer DaeJi” pero a su cuerpo poco le importa lo que su conciencia quiera. JiHo la aparta de la pared cargándola para ...
Historias de una escritora novata.