SungMin sonríe. – Vaya vaya… ¿A quién tenemos aquí…? No puede ser… -YangMi bufa y frunce el ceño- ¿Por qué tengo tanta mala suerte? ¡De miles de lugares tenías que estar aquí! SungMin se acerca a ella- Pero si la que ha venido eres tú. –La señala- Este es mi lugar de trabajo desde hace un año y si no te gusta puedes irte. - ¡Por supuesto que me voy! –ella se dirige hacia la puerta y sale de la bodega. - ¿Ya has hablado con SungMin? –pregunta el dueño del minimarket acercándose a ella. - Si, pero… señor… - Mira. –le entrega una hoja- Este es tu contrato. La mirada de YangMi es atraída de inmediato por el monto de dinero que se le pagará por hora, es más de lo que comúnmente se paga en un trabajo a medio tiempo. - ¿Ibas a decirme algo? –pregunta el jefe. - No. –YangMi sonríe- Muchas gracias por contratarme, ¿Dónde firmo? - Aquí –el jefe le entrega un esfero e indica donde firmar. Después de firmar el contrato YangMi regresa a la bodega. - ¿No te ibas? –p...
Historias de una escritora novata.