–27– ¡¡Fiesta!!

¡¡Fiesta!!

–¿Qué fiesta?

–Hola ______ –SamD agitó su mano saludando–. ¿Ya no saludas?

–Disculpa oppa –ella sonrió–. Hola.

–Es muy temprano para ir –mencionó Jay–. Aún hay luz. Nosotros llegamos cuando oscurece.

–Me adelanto entonces –informó SamD–. Quiero improvisar un poco, los niños de hoy me han olvidado. Eso no puede ser.

–¿Improvisar? –cuestionó ______.

–Has escuchado mis canciones, pero eso solo es el 50% de mi talento. Aún no conoces lo bueno que soy rapeando.  

–Me gustaría tanto ir –dijo ella emocionada.

–Vamos entonces –agregó Loco sonriente.

–¡Si! –ella sonrió emocionada.

–Nosotros iremos más tarde –informó Gray.

–Yo –Zico levantó su mano como un niño emocionado–. Yo voy con ustedes, SamD hará freestyle ¡Eso debo verlo! Ha pasado tanto tiempo hyung, quizá… te sorprendan, las habilidades de los chicos no son broma.

–Sigo siendo el mejor –respondió SamD con una ceja levantada–. No me subestimes.

–Veremos si tanto bla bla es cierto –comentó ______ juguetona.

–¡Wuuu! ¡Ujuju!  –exclamó Zico entre risas.

–¡Eso es un desafío! –agregó Jay también riendo.

–Yo solo dije un comentario, no era un desafió –explicó ella riendo.

–¡Eishh! –exclamó SamD negando con su cabeza y se acercó a ella para pellizcar su mejilla–. Pequeña alborotadora.

–No lo soy –respondió ella entre risitas frotando su mejilla.

–Vamos –pidió SamD.

–Traeré mi auto hasta la puerta –propuso Loco–. Hyung, deberías acabar tu hamburguesa.

–Oh, es cierto –SamD regresó a la mesa para tomar su hamburguesa.

–Tomate tu tiempo hyung –pidió Loco mientras tomaba la mano de su novia–. Nosotros nos adelantamos.

–Oh si, que considerado Loco –carcajeó Jay–. Lo que quieren es tiempo para… –levantó las cejas y sonrió.

–No seas desvergonzado –murmuró Gray–. Cuando tus hyungs están tan solitarios presumes que tu tienes una novia.

–No entiendo –musitó ______.

–No les hagas caso –susurró Loco sonriente–. Vamos.

_____ se dirigieron al estacionamiento del edificio, caballerosamente Loco abrió la puerta del auto para su que su novia subiera y cerró con cuidado para luego correr hacia el lado del conductor y subió.

–¡Cierto! –exclamó repentinamente ella.

–¡Ah! me asustaste…

–Lo siento –ella sonrió–. Acabo de recordar.

–¿Qué cosa?

–Dijiste que tenías otra sorpresa.

–Oh, eso –él sonrió–. Se me había olvidado. Abre la gaveta.

–¿Está aquí? –cuestionó ella mientras abría la gaveta frente a ella–. ¿Es esta bolsa de papel?

–Si, sácalo –él estiró su mano hacia el asiento trasero alcanzando su mochila.

–¿Qué es?  –cuestionó ella mientras abría la bolsa de papel.

Loco sacó de su mochila un estuche igual al que su novia acababa de sacar de la bolsa de papel.

–Wow… esto es… –ella se sorprendió al abrir el estuche que contenía unos cascos de diadema.

–¿Te gustan? –cuestionó él sonriente.

–Si… pero…  –ella dudó mientras analizaba los cascos de diadema.

–Te ayudo –él tomó los cascos para desplegarlos.

–Ah… así se abren, pero… es muy….  –ella regresó su mirada hacia el regazo de Loco–. ¿Y los que tienes ahí?

–Estos, son sin diadema –él abrió su estuche para mostrar unos audífonos pequeños–. Compré el set completo de sonido. Pensé en darte a ti esos que son con diadema y yo me quedaré con estos pequeños.

 

 

 

 

 

 

–Me encanta, pero son demasiado… ¿Cuánto te costaron?

–Son una edición limitada, el precio no importa. Yo te los estoy regalando.

–Lo supuse, se ven demasiado bonitos como para ser unos simples cascos, seguramente son carísimos… No puedo aceptarlos.

–Pero yo quiero dártelos –él hizo un puchero–. Acéptalos.

–Bien… –ella suspiró mientras lo miraba y estiró su mano hacia él para tomar los audífonos que tenía en su mano–. Entonces, que te parece si yo me quedo con estos.

–Pero los cascos son mejores y más bonitos ¿No lo crees?

–Si amor, pero son demasiado para mí. Estoy segura de que esto costo más de lo que yo podría pagar por un regalo para ti.

–No, te doy esto esperando que tú me des algo a cambio. Es solo que vi tus audífonos, tienen cinta adhesiva…

–Ah… es que se estaba pelando el cable –ella sonrió despistada–. Pero funcionan perfectamente.

–Solo acepta lo que te doy –él la miró ladeando su rostro–. No tienes que devolver algo a cambio.

–Está bien, pero me quedo con estos pequeños. Los grandes de diadema van más contigo, tú eres famoso –con cuidado colocó los cascos a su novio–. Se te ven muy bien.

–Te amo hermosa, ¡Te amo! –él imitó un gritito agudo.

–No planeaba decirlo en esas circunstancias –ella sonrió avergonzada.

–Me gustó.

–¿La pelea? –ella frunció el ceño e hizo un mohín.

–No, la pelea no. Me gustó que gritaras que me amas. Repítelo.

–No quiero.

–Dilo –suplicó él adorablemente.

–No –ella se cubrió el rostro avergonzada.

–Dilo dilo dilo –insistió él retirándole las manos para que pudiera verlo hacer un puchero adorable.

_____ lo miró con ternura, lo tomó por las mejillas para acercarse y darle un beso fugaz para luego repetirle la confesión previa. Un golpecito en la ventana los sacó de su momento cariñoso, era Zico quien permanecía frente a la ventana con sus ojos entrecerrados. Loco sonrió al ver la graciosa expresión de el intruso y quitó los seguros del auto para que pudiera subir.   

–Woah –esbozó Zico con sorpresa mientras subía al auto–. JaeBeom hyung tenía razón. Querían tiempo para darse besitos. Cochinos.

–¿Cochinos? –carcajeó _____.

–¿Y SamD? –cuestionó Loco.

–Dijiste que llevarías el auto a la entrada –explicó Zico–. Esperamos, pero tardabas tanto que SamD hyung empezaba a impacientarse, por eso vine a buscarte, hyung.

–Es cierto, me distraje un poco –explicó Loco sonriente mientras se ponía el cinturón y puso en marcha el auto.

Al ver el auto de Loco llegar, SamD caminó hacia aquel y abrió la puerta del copiloto ya que los vidrios eran oscuros y no había notado que ese sitio ya estaba ocupado.

–Oppa –musitó ______ mirando a SamD.

–¿Hyung… podrías ir atrás esta vez? –pidió Loco.

–Agh… –gruñó SamD dando un paso atrás.

–No no –______ se quitó el cinturón de prisa y bajó–. Yo iré atrás.

–No, espera –pidió Loco estirando su mano.

–Normalmente este es el sitio de SamD –explicó ella sonriendo comprensiva y se dirigió hacia la puerta de atrás para subir junto a Zico.

–Gracias pequeña –agradeció SamD cerrando la puerta tras haber subido al auto–. Por lo menos alguien aquí me respeta –miró de soslayo a Loco haciendo una mueca y se colocó el cinturón.

–Hyung, yo te respeto mucho –explicó Loco poniendo en marcha el auto–. Solo quería tener a mi novia a mi lado mientras conduzco.

–Es mejor evitar que nos vean juntos –dijo ella junto a un suspiro.

–¿Por qué no? –cuestionó Zico.

–Ya hubo rumores cuando solo éramos amigos, pero las fans lo mal interpretaron… No les agradó que una extranjera estuviera saliendo con su artista favorito. Comentaron cosas muy feas sobre mí.

–No les hagas caso –suspiró Zico–. Solo te tienen envidia.

–Si –ella sonrió con tristeza–, supongo que muchas quieren ser la novia de Loco.             

–No lo decía por él –Zico carcajeó–. Tu eres muy bonita, las coreanas envidian esa belleza extranjera exótica.

–No soy exótica –______ rio–. Pero gracias por animarme.

–Eres preciosa –agregó Loco mirando brevemente por el espejo.

–Por supuesto que lo es –concordó SamD regresando su mirada–. Si deciden hacer pública la relación, todos en AOMG te apoyaremos sin importar lo que digan las fans.

–Muchas gracias oppa –______ puso su mano sobre el hombro de SamD agradecida.

Minutos después, llegaron al lugar de la fiesta, se trataba de una casa moderna muy amplia, el salón era tan grande que cabía una tarima donde una DJ mezclaba el ritmo con el que rapeaban algunos chicos enfrentándose en batalla mientras otros raperos los alentaban o abucheaban.

Junto a la pared había sofás con pequeñas mesitas de centro enfrente, el lugar había sido ambientado como un club. SamD dijo que se uniría a los raperos mientras que Loco, Zico y ______ se sentaron en uno de los sofás.

Una mujer alta y delgada se aproximó a ellos contoneando sus caderas exageradamente en un fallido intento de lucir sexi, ella miraba fijamente a Loco y al llegar sonrió para dirigirse a él con un tono de voz chillón. 

–¡Omoo! Hola oppa, tiempo sin verte –se sentó en el brazo del sofá junto a Loco poniendole su mano sobre el hombro–.  ¿Me has extrañado? Porque yo si…

–Mira nada más –interrumpió Zico apresurándose a la mujer y la tomó del brazo apartándola de Loco–. Que guapa estás, acompáñame a buscar algo de beber.

–¿Que fue eso? –cuestionó ______ mirando como Zico se llevaba a la chica quien no parecía querer acompañarlo.

–¿Estás celosa? –Loco sonrió.

–Puso su mano en tu hombro –______ frunció su ceño–. Responde, ¿Quién es esa flacuchenta?

–Flacuchenta… –repitió Loco y soltó una carcajada.

–¡Responde!

–Alguien sin importancia.

–“¿Me extrañaste?” –______ imitó el tono chillón de la voz de aquella mujer y rodeó sus ojos mientras se ponía de pie–. ¡Por qué habrías de extrañarla!

–No debes tener celos de alguien como ella –Loco también se puso de pie.

–¿Quién dice que tengo celos? Solo quiero saber que es ella para ti.

–No es nadie.

–Si no me lo dices tú, lo hará ella. Ahí viene –señaló con el mentón a la mujer que se aproximaba a ellos.

Loco dirigió brevemente su mirada hacia el lugar señalado y tomó a _____ por la cintura acercándola a él para besarla.

–¿Qué haces? –cuestionó ______ sorprendida al apartarse y observó alarmada en todas direcciones–. Hay mucha gente viéndonos…

–No me importa –musitó Loco acercándose al oído de su novia–. Que todos nos vean.

La mujer observó a la pareja desde la distancia con una expresión de enfado, dio media vuelta y se fue.

–Vamos a ver la batalla –propuso Loco tomando de la mano a su novia y la llevó frente a la tarima.

–¡Es BewhY! –exclamó ella al ver al rapero subir a la tarima.

–No me digas –Loco puso en blanco sus ojos–, eres fan de él.

–¡Siiii! –respondió ella en un grito ahogado–. Es grandioso… ay –se aferró al brazo de su novio–. No tan grandioso como tú, por supuesto.

–Gray tenía razón, tienes el síndrome de la fanática –sonrió Loco negando con su cabeza.

–No te enfades –suplicó ella adorablemente.

–Ya no me enfadaré, princesa. Aprenderé a vivir con tu fanatismo.

Las horas pasaron y la batalla de rap amistosa terminó, ahora el lugar estaba lleno de gente que bailaba, bebía y platicaba. Los parlantes retumbaban al ritmo que mezclaba una DJ evidentemente extranjera.

Todos los artistas de AOMG y H1GHR se había reunido en aquella fiesta, compartiendo una noche divertida como amigos y familia de disquera, algunos ya estaban bastante ebrios y hacían o decían cada locura que era alentada por los demás. ______ empezaba a aburrirse así que tomó una lata de cerveza que estaba en la mesa y se dirigió hacia la DJ.

–Hola –saludó ______ gritando para ser escuchada y mostró la lata en su mano–. ¿Quieres una?

–¡Hola! –respondió la DJ sonriente, retiró el casco de uno de sus oídos y estiró su mano para aceptar la cerveza–. Gracias, moría de sed.

–Noté que no has bebido nada en toda la noche –comentó ______ mientras miraba a la DJ beberse la cerveza rápidamente–. Así que quise traerte una cerveza.

–Eres muy amable, nadie me ha ofrecido siquiera agua –explicó la DJ sonriendo.

–Eres muy buena DJ –confesó.

–Gracias –la DJ rio–. ¿De dónde eres?

–¿Es inevitable notar que soy extranjera? –_______ rio despistada tras responder a la pregunta.

–Si, supongo que la gente lo nota de inmediato al igual que conmigo.

–De hecho, por eso me he animado a venir y saludarte.

–Te comprendo. Los extranjeros somos mas sociables que algunos coreanos.

–Si… No quiero molestarte en tu trabajo, ¿Está bien si te hago plática?

–No te preocupes, puedo platicar y mezclar ritmos a la vez. Además, podrías ser la bailarina de apoyo –la DJ carcajeó.

–¡Por supuesto!

______ se tomó muy en serio la broma de la DJ y empezó a bailar al ritmo que sonaba a la vez que platicaba.

Un par de horas después, Loco notó que su novia había desaparecido y se sintió aterrado además de culpable por no prestarle atención.

–¿A quién buscas? –cuestionó Gray al ver a Loco buscando con su mirada alrededor.

–A ______, la he perdido de vista un momento y no sé… a donde fue.

–¿Un segundo? –carcajeó Gray–. ¿Cómo pudiste no notar que se fue hace mucho?

–¿Se fue? ¡Sola!

–Tranquilo, no se fue de la fiesta –Gray señaló–. Mira allá.

______ saltaba y sacudía su cabello al igual que la DJ al ritmo de la música, ella tenía una botella de cerveza en su mano y los grandes audífonos de la DJ alrededor del cuello, se había quitado la chaqueta y la tenía atada a la cintura bajo su ombligo no cubierto por el corto top blanco de mangas largas y cuello alto.

–Creo que ______ ya está muy ebria –comentó Gray entre risitas.

–¿Como llegó ahí…?

–No sabía que la DJ era su amiga –agregó Gray.

–Bueno, parece que ahora si lo es –suspiró Loco negando con la cabeza. 

–Esa niña ha bebido demasiado –interrumpió SamD también mirando a ______–. Después no se acordará de nada, es como tú HyukWoo.

–Iré a bajarla de ahí… –gruñó Loco al dar un paso.

–Deja que se divierta –Jay detuvo a Loco por el hombro–. Solo mantenla vigilada. Ha llamado la atención de muchos acechadores, mira como babean por ella –Jay carcajeó. 

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