Capítulo 11: Adiós DongHo…

Largas hebras de cabello enredadas en dos trenzas hechas sin cuidado y al apuro son puestas con sumo cuidado en el borde de la tina de baño y una vez terminado el atentado contra su larga cabellera YangMi levanta su rostro hacia el espejo y sonríe alborotando su muy corta melena orgullosa y satisfecha con su nuevo aspecto, se da los últimos retoques cortando un flequillo hacia adelante y ha concluido con su cambio de imagen. Sonríe con cierta maldad ya que anticipa la reacción de su madre al ver que la cabellera que tanto cuidaba en su hija ha desaparecido.

Pasaron dos horas y YangMi no tiene su teléfono ni nada con que entretenerse, ha sacado una caja que tenía escondida bajo la cama.

La madre de YangMi nunca le permitió usar maquillaje alegando que no lo necesitaba ya que es naturalmente hermosa, pero eso no impidió que YangMi comprara maquillaje a escondidas. La caja está llena de maquillaje y planea usarlo diario a partir de hoy.

El timbre de la casa de los Lee suena y la madre se apresura a abrir la puerta para saludar a su cuñado y cuñada.

- Gracias por venir hermano -YoongSo abraza a su hermano para después saludar a su cuñada

- Esta bien hermano –El hermano responde con un tono calmado- hace tiempo que no nos vemos, me sorprendió tu llamada.

- Vinimos tan rápido al saber que había un problema con YangMi –pregunta la cuñada- ¿Cómo esta ella?

EunJa suspira y sus ojos se llenan de lágrimas, toma la mano de su cuñada. –Vamos a sentarnos.

Después de unos minutos y el drama de una madre preocupada, la historia ha sido contada con lujo de detalles.

- Pensé en enviarla a un internado o…  -YoongSo es interrumpido por su hermano

- Ya no es una niña pequeña hermano -el hermano se mantiene pensativo

- Lo sé y por eso es que te llame, no puedo obligarla a ir a un internado o algo similar, pero puedo alejarla de este lugar.

- No lo sé… -la cuñada duda- ella ya es mayor de edad…

EunJa insiste. - Pero no por ser mayor de edad puede destruir la vida tan perfecta que le hemos creado, ella no es cualquier jovencita, ella es nuestra hija.

YoongSo alega. -Tenemos una imagen que cuidar ante la comunidad de nuestra iglesia, como podemos predicar pureza y bondad para los jóvenes si nuestra hija se mezcla con malandros como ese tú debes comprender eso hermano.

El hermano de YoongSo solamente asiente y mira a su esposa con complicidad para luego responder. –No te preocupes hermano, Byung Il acaba de ir de viaje con ByungYoon y después de eso se quedará en la base militar para su servicio, tenemos una habitación disponible para YangMi y ByungYoon es vice presidente del consejo estudiantil en su universidad, seguramente eso nos puede ayudar con la transferencia de YangMi.

- ¡Gracias hermano! –YoongSo se levanta y le da un abrazo a su hermano- Sabía que podía contar contigo

- Iré a llamar a YangMi –EunJa más calmada se levanta y camina hacia las gradas.

- Voy contigo cariño -YoongSo la acompaña dejando su hermano y cuñada en la sala.

Al irse la pareja de padres preocupados la cuñada se levanta y espía hacia las gradas para confirmar que se han ido al segundo piso para no ser escuchada, regresa con su esposo y susurra.

- ¿Estás seguro de esto cariño?

- Los escuchaste “La vida perfecta que le hemos creado” –frunce su ceño- mi hermano es demasiado estricto, ha encerrado tanto a la pobre YangMi que ahora ella está intentando escapar desesperadamente. No podemos permitir que nuestra sobrina se dañe a si misma por la estricta enseñanza de mi hermano.

- ¿Pero no deberíamos decirles eso directamente?

- Sabes que mi hermano es muy necio, no quiero discutir con él, hagamos esto por YangMi.

De pronto un grito de terror interrumpe la plática en susurros, se levantan a prisa y corren hacia el segundo piso para encontrarse a EunJa llorando y a YoongSo con su puño levantado a punto de agredir a YangMi, el hermano corre a prisa para detenerlo.

- ¡Cálmate hermano!

- ¿Tío? –YangMi se sorprende

- Si –el tío sonríe- hola nena.

- ¡¿Cómo pudiste cortarte el cabello así?!  -EunJa llora mirando a su hija y siendo sostenida por su cuñada.

- ¡Y eso que llevas puesto en la cara! –El padre la señala llenándose de nuevo de ira.

- De acuerdo, de acuerdo. –el hermano contiene a YoongSo- Vamos a calmarnos y hablar. YangMi por favor baja a la sala un momento. Vamos hermano -se lleva a su hermano.

- Vamos EunJa –la cuñada también lleva a la madre angustiada.

Tras un té de valeriana para calmar los nervios, todos están calmados excepto YangMi quien llora de impotencia tras enterarse de los planes que tienen sus padres para ella.

- No pueden obligarme a ir. No soy una niña.

- Si no vas con tus tíos te enviaremos al extranjero, -el padre más calmado le explica- aunque seas mayor de edad no puedes hacer lo que tú quieras porque somos tus padres y vives bajo nuestro techo.

- ¡Pues me iré de esta casa! –YangMi grita

- ¿Ah sí? –la madre reta a la hija- y dónde vas a vivir, ¿con ese maleante que tienes por amigo?

- ¡No metas a DongHo en esto mamá!

- Nena –la tía de YangMi la rodea con su brazo- cálmate, si te vas de tu casa hay muchos peligros para una jovencita, además tendrías que trabajar para mantenerte y también continuar con la universidad.

-Puedo hacer eso tía. –YangMi mira a su tía con lágrimas brotando- muchas chicas de mi edad tienen trabajos a medio tiempo y continúan sus estudios.

- Pero es un poco difícil si estás sola. –la tía le sonríe proporcionándole consuelo- ven a vivir con nosotros. Byung Il va a entrar al servicio militar y nos dejará la casa tan vacía. ByungYoon va a sentirse solo.

-Tía… -YangMi empieza a convencerse- pero mi universidad…

- No te preocupes por eso YangMi –su tío también le proporciona confianza- tu primo puede ayudarte con el traspaso de universidad, supongo que con lo buena estudiante que eres tienes todas tus materias cubiertas y pasaste este semestre ¿verdad?

- Si, pero… -YangMi está a muy poco de ser convencida- mis amigos…

- No te preocupes –el tío suelta su ultimo argumento- solo estamos a dos horas en tren, puedes venir a visitarlos los fines de semana.

- Bueno… -y finalmente YangMi es convencida- puedo intentar por un tiempo… -mira a su madre y padre con rencor- además quiero alejarme de ustedes. 

- ¡Continuas con tu insolencia!  -el padre grita.

- Hermano por favor, cálmate. –el hermano aprieta los dientes intensificando su mirada en el alterado padre- Tu hija ha aceptado ir con nosotros. Vamos a dejar los gritos y las peleas ¿De acuerdo?

- Iré a mi habitación a recoger mis cosas… -YangMi se dirige a su habitación con tristeza, pero sus tíos la han convencido y lo que más la motiva es alejarse de sus padres.

El tío de YangMi toma la gran maleta para llevarla al auto y tras llevar todo lo que YangMi consideró suyo y que podía llevarse de su habitación se despide con un seco “Adiós” de sus padres antes de subirse al auto de sus tíos.

Ya en el auto en movimiento YangMi dudosa, pero se atreve a pedirle un favor a su tío que conduce.

- Tío… puedes ir por eso calle a la derecha –señala.

- ¿Tienes alguien de quien despedirte? –pregunta su tía.

- Si… -YangMi teme la respuesta.

- Está bien –el auto gira en la dirección indicada.

YangMi dirige a su tío hasta llegar a la casa de su amigo DongHo y baja a prisa para tocar el timbre de la casa rogando que sea DongHo quien habrá la puerta y no su padrastro o madre.

La puerta se abre, DongHo se sorprende al ver a su amiga y su drástico corte de cabello, antes que pudiera hacerle una broma por su apariencia ella se lanza abrazándolo con fuerza y empieza a llorar.

- Que pasa… YangMi… -DongHo no entiende por qué su amiga llora

- No podía irme sin despedirme de ti -YangMi no lo suelta.

- ¿Irte? ¿A dónde? YangMi… -la aparta para poder mirarla- ¿De qué hablas?

- Me iré a vivir con mis tíos –regresa brevemente su mirada hacia el auto que la espera- es una larga historia, te escribiré para explicarte.

- YangMi… -DongHo se preocupa- ¿Vas a estar bien?

Ella da un paso atrás. – No te preocupes. –empieza a caminar hacia atrás- mi teléfono esta sin batería, pero en cuanto lo recargue te escribiré. –Ella le dedica una última sonrisa a su amigo antes de darse la vuelta y caminar hacia el auto.

- Cuídate… -La confusión y tristeza invaden a DongHo al verla alejarse en aquel auto.

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Dos horas después YangMi entra en la que será su habitación.

- Tío… ¿De cuál de mis primos es esta habitación?

Él tío deja la gran maleta de YangMi junto a la cama- Es de ByungYoon, él se mudará a la de ByungIl, ya lo hablamos. No te preocupes.

- Bueno…  -insegura- espero no causar molestias tío.

- No causas molestia. –entra la tía con sabanas limpias- Cambiaré las sabanas. –señala- toma esa caja y pon ahí toda la ropa de los cajones. –mira a su esposo- cariño, por favor trae otra caja y ayuda a YangMi.

- Si señora -el tío responde en tono militar como broma y se va para cumplir la orden.

- ¿Mi primo no se molestará porque saquemos sus cosas…? –YangMi abre el cajón dudosa.

- Claro que no. –La tía responde mientras continúa cambiando las sabanas- En realidad ByungYoon buscaba la oportunidad de mudarse a la habitación de su hermano -ríe- le diste la excusa perfecta.   

- Ya veo… -YangMi sonríe y continúa sacando la ropa de los cajones para ponerla en la caja- Hace mucho que no veo a mis primos. La navidad pasada no vinieron a visitarnos.

La tía sonríe apenada- Lamentablemente tuvimos otros planes y no pudimos ir nena.

YangMi sonríe algo tímida. –Tía… aun me llaman “nena”

- Oh, es cierto. No me había dado cuenta.

- Es la costumbre –el tío entra con la caja y continua con su quehacer- ByungYoon te llamaba incesantemente “nena” así que te quedaste con ese sobrenombre.

- ByungYoon te quiere mucho. –la tía ha terminado- Se puso muy contento cuando supo que vendrías.

- Es cierto –El tío levanta la caja que ya ha llenado con la ropa de su hijo- él estaba muy triste la navidad pasada porque no fuimos a visitarte. Ahora llevaré esto abajo… -se va

- Yo llevaré esta otra caja –la tía toma la caja- siéntete como en tu casa nena. –sale de la habitación

- Gracias tía~ -YangMi de repente está contenta e incluso un poco emocionada por vivir con sus tíos y anhela ver a su primo.

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Horas después la noche ha caído y YangMi finalmente ha terminado de guardar toda su ropa perfectamente doblada, se recuesta en la cama agotada.

- Nena –su tía grita desde abajo- iremos a comprar algo para la cena. No nos tardamos.

- Esta bien -responde YangMi desde la habitación sin levantarse de la cama debido al cansancio.

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SungMin va llegando a su casa, ve el auto de los padres de su amigo irse y mira la luz de la habitación de su amigo encendida cosa que le parece extraño, pero le da poca importancia y entra en su casa.

La ventana de SungMin está enfrente de la ventana de su amigo, YangMi decide darse un baño, se desviste y apaga la luz de la habitación para entrar al cuarto de baño y cierra la puerta. SungMin pudo ver una sombra a través de las gruesas cortinas antes de que la luz se apagara.

- ¿ByungYoon está aquí? –Se cuestiona SungMin mientras llama al teléfono de su amigo, pero este le manda a buzón- Necesito contarte lo que paso hoy tonto… respóndeme… -insiste en marcar de nuevo es enviado al buzón otra vez.

- Porque demonios no me respondes… -se cuestiona SungMin mientras abre la ventana de su habitación y con tan solo un amplio paso ya está en el borde de la ventada contraria, la abre y llama a su amigo- Oye ByungYoon… ¿ByungYoon?  -La habitación esta oscura, pero se puede ver una delgada línea de luz bajo la puerta del cuarto de baño además del sonido del agua corriendo por lo que SungMin supone que su amigo se está dando una ducha y decide esperarlo, pero se está tardando demasiado así que decide jugarle una broma; rápidamente se mete dentro de la manta cubriéndose por completo. En la oscuridad de la habitación apenas iluminada por la luz de fuera, la presencia de SungMin es casi imperceptible.

El sonido del agua a cesado, cosa que le indica a SungMin que su amigo está a punto de salir.

YangMi busca una toalla, pero al parecer no hay, guardo su toalla en el armario y no le queda más remedio que salir desnuda a buscarla.

SungMin escucha la puerta del cuarto de baño abrirse y se prepara para sentarse muy lentamente lamentándose como si fuera un fantasma, espera darle un gran susto a su amigo.

YangMi camina hacia el armario junto a la cama aún sin encender la luz, abre la puerta y escucha un leve… ¿lamento? Un escalofrío recorre su espalda y mira hacia la cama donde parece levantarse una figura, ella grita aterrada y corre hacia el interruptor de la luz.
Al escuchar un grito femenino SungMin quita la manta de su cabeza...

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