-¡Detenga el autobús! -grita SungMin presionando histérico el botón
-Oye cálmate -ByungYoon retira la mano de su
amigo del botón que probablemente ya se averió por la intensidad con la que
SungMin lo presionaba.
-¡Déjame!
-SungMin se sacude del agarre de su amigo y continua con su histeria,
esta vez dando golpes en la lata sobre la puerta. -¡Detenga el autobús!
-¡¿Qué demonios te pasa gamberro?! -le grita desde delante el conductor
intentando localizar al alborotador a través del espejo. –¡No puedo hacer
paradas donde a ti se te antoje!
Al llegar a la esquina el semáforo cambia a luz
roja y SungMin da golpes a la puerta, el conductor muy molesto abre la puerta
para librarse del alborotador quien baja a prisa seguido de su amigo.
-¡¿A dónde corres idiota?! -ByungYoon intenta correr al ritmo de su
amigo
-¡Esa pequeña mentirosa me las va a pagar! -Grita histérico SungMin mientras continua
corriendo
Los dos jóvenes llegan a la parada de autobús y
SungMin analiza rápidamente con su mirada a cada una de las personas cercanas a
dicha parada, no localiza a la chica de quien desea vengarse.
-¡Maldita sea! –Maldice SungMin frustrado- ¿Por
dónde se fue…? -mira en todas
direcciones
-¿Puedes calmarte ya? -ByungYoon le da una palmada en la espalda
-¡La he visto!
-Bien, la has visto ¿Y que ibas a hacerle o
decirle? ¡¿Eh?! –ByungYoon frunce su rostro- Eres mi amigo, pero a veces en
serio me frustras. Actuaste como un salvaje en el autobús.
-¡Esa estúpida provoco que me arresten, me
golpeen y me encierren en ese asqueroso lugar con criminales.
-Vamos, no exageres, solo estuviste encerrado
unas horas y ni siquiera era la cárcel, solo era la estación de policía.
-¿Y el trauma psicológico? –SungMin finge
inocencia- incluso lastimaron mi hermoso rostro por culpa de esa tonta. Como
mínimo debe darme una compensación.
-¿Compensación? –ByungYoon estalla en risa-
Compensación es la que me tienes que dar tu a mí. No olvides que me debes el
dinero de la fianza.
-¿Lo ves? Es lo que esa tonta me debe pagar,
así puedo pagarte a ti y el resto será…
ByungYoon lo interrumpe. -¿Cuánto dinero
planeas pedirle como “compensación”? -ríe- No te dará un centavo y quizá hasta te
demande por extorción.
-Bueno bueno, no le pediré dinero, pero al
menos una disculpa debe darme ¿No lo crees?
-Supongo que sí pero ya no hacemos nada en este
lugar, ella ya no está aquí. Ahora tenemos que esperar otro autobús.
SungMin suspira. –Si… Pero si la vuelvo a ver…
-hace un puño con su mano.
---
-¡Este tteokbokki esta delicioso! –expresa
YangMi con su boca llena.
-Te lo dije. Este es el mejor tteokbokki -DongHo también llena su boca- Extrañaba tanto
comer aquí.
-No has venido por más de un año ¿Verdad?
DongHo asiente con su cabeza sin dejar de
comer.
YangMi sonríe y le pasa una servilleta. –Nadie
va a quitarte tu comida, come despacio.
Minutos después, DongHo y YangMi suben por las
gradas de un edificio.
-¿Que piso es?
-pregunta YangMi casi sin aliento
-El quinto
-¿Y en que piso vamos? -ella se detiene exhausta
-En el tercero –Dongo baja un escalón jalándola
del ojal de su mochila como si fuera un títere- no falta mucho.
-¿Por qué no hay elevador? –continua subiendo
siendo jalada por su amigo
DongHo finge una voz algo graciosa. -Solo son
cinco pisos ¿Para que un elevador?
-entrecierra los ojos- Es lo que dijo la presidenta de este edificio,
los demás propietarios no se pusieron de acuerdo, así que nunca se hizo un
elevador.
-¿Viviste aquí por mucho tiempo?
-Mis padres compraron el apartamento cuando yo
tenía tres años, así que desde ese entonces viví en este edificio.
-Oh… ahora entiendo porque tienes esas piernas
–ella lo mira sin disimulo.
-¿Por qué miras mis piernas? -le pellizca una mejilla y se adelanta-
pervertida.
-¡¿Qué?! –ella acelera su paso para alcanzarlo-
¡No soy una pervertida!
-Así que te la pasas admirando mis piernas
¿Eh? -él continúa subiendo sin mirarla
-¡Claro que no!
-ella se sonroja- Es solo que cuando juegas futbol en la universidad…
bueno ¡Todo el mundo ha visto tus piernas! Si levantas tu pantaloneta en tus
muslos. Indecente…
DongHo estalla en carcajadas y se detiene para
mirarla. –Lo hacemos porque tenemos calor. Pero todo el equipo lo hace ¿Y solo
viste mis piernas? –le sonríe coqueto
YangMi gira su cabeza evitando la mirada de su
amigo. -¡Olvídalo!
Él se acerca para susurrarle. -¿Es por eso que
te me lanzaste encima de esa forma? ¿Tanto me deseas?
-¡Dijimos que nunca más hablaríamos de eso! Yo
estaba… -susurra- drogada, no sabía lo que hacía.
DongHo ríe burlón y continúa subiendo las
gradas. –Lo sé, lo sé. Fue solo por la marihuana.
-¡No lo digas tan alto! –gruñe ella
-Es aquí -Él se detiene frente a una puerta y
toma un profundo respiro.
-¿Estas bien?
-YangMi nota algo de nerviosismo en el rostro de su amigo.
-Si… es solo que no he visto a mi padre en
mucho tiempo…
-Pero hablas con él casi todos los días,
estarán bien -ella toca el timbre junto a la puerta.
Con nerviosismo DongHo aclara su garganta
completamente erguido y conteniendo la respiración mientras mira expectante la
puerta, esta se abre lentamente y una mujer no muy alta de cabello rizado y
anteojos dibuja una sonrisa en sus labios.
-¡Cielo santo! Eres muy alto y apuesto. –gira
su cabeza levemente mientras retrocede y abre la puerta por completo- Amorcito,
tu hijo ha llegado.
Un hombre alto se aproxima a la puerta con
rapidez y una gran sonrisa para abrazar fuertemente a DongHo.
-Papá… -DongHo corresponde el abrazo, pero
desea ser soltado rápidamente, cosa que su padre no piensa hacer- Papá… no
respiro…
-Oh si si… -el padre de DongHo ríe y lo suelta
para mirarlo de pies a cabeza- has crecido mucho hijo.
-No es cierto… -DongHo se sonroja y aclara su
garganta- Por cierto, esta es YangMi, mi mejor amiga.
-Vaya… así que tú eres YangMi -El hombre
rápidamente escanea a YangMi- eres una linda muchacha.
-Gracias. –YangMi hace una reverencia- Es un
gusto conocerlo señor Kang.
-Amorcito –la mujer de cabello rizado sugiere-
Haz pasar a los niños. ¿Acaso piensan quedarse en la puerta toda la noche?
-Es cierto, que tonto soy –el padre de DongHo
da un paso atrás invitando a los jóvenes a pasar- pasen.
Al entrar en el departamento DongHo se asombra
de todos los cambios que ha tenido el lugar en tan solo un poco más de un año,
ahora parece un departamento completamente diferente.
-Vengan por aquí. –El señor Kang los dirige
hacia la sala.
-Papá, espero que no te moleste que trajera a
mi amiga.
-Por supuesto que no –el señor Kang sonríe-
Tomen asiento. Me alegro mucho de que la hayas traído, me has hablado tanto de
YangMi que ya quería conocerla.
-¿DongHo le ha hablado de mí, señor Kang?
-Por supuesto –el señor Kang sonríe- lo
ayudaste a adaptarse a esa nueva ciudad. Sé que lo apoyaste cuando pasaba por
momentos difíciles con la loca de su madre…
-se queda en silencio por unos segundos al darse cuenta de la ofensa que
acaba de pronunciar- emh… quiero decir… bueno…
-Está bien papá… -DongHo suspira- no tienes que
arreglar lo que acabas de decir.
-Lo lamento hijo, es solo que. Tu sabes que tu
madre y yo no nos llevamos bien, con todo lo de los abogados, el divorcio…
-Señor Kang. –YangMi interrumpe al notar la
plática incomoda- Su departamento es muy bonito.
-¿Te gusta? –la mujer de rizos se alegra con el
comentario- Lo remodele yo misma, soy diseñadora de interiores.
-Ya veo… -DongHo sonríe algo incómodo- Se ve
muy bien…
-Bueno, pero que grosera soy. No les he
ofrecido nada de comer –la mujer de rizos se pone de pie- Seguramente vienen
cansados del viaje, deben tener mucha hambre.
-No se preocupe señora… -YangMi no sabe cómo llamar a la mujer-
nosotros… ya comimos.
-¿Tteokbokki? –el señor Kang cuestiona con una
sonrisa.
-Si
-responde DongHo con orgullo.
-Te encantaba el tteokbokki de la esquina.
-El tteokbokki es delicioso, pero no es una
comida nutritiva -alega la mujer de rizos- les prepararé algo rápido y
saludable. –se retira de la sala hacia la cocina.
-Papá…
-DongHo aclara su garganta- pensé que tu novia no estaría aquí… Tu
dijiste que se iría el fin de semana a un viaje de trabajo…
-Se canceló a último minuto. Además, cuando
supo que ibas a venir se emocionó mucho.
-Papá… te dije que aún no quería conocerla…
-Hijo, por favor. Dale una oportunidad.
-Papá -DongHo se molesta y estruja el brazo del
sillón
-DongHo… -YangMi pone su mano sobre el brazo de
su amigo y le susurra- cálmate.
-Lo siento hijo. Sé que me pediste más tiempo
antes de conocerla y te aseguro que no ha sido a propósito, sus planes de
trabajo se cancelaron a último momento. No podía pedirle que se fuera a algún
lugar el fin de semana.
DongHo mira hacia el piso sintiendo la mano de
YangMi sobre su brazo ligeramente acariciándolo con el pulgar como si lo
calmara de alguna forma, relaja su agarre al brazo del sillón por la molestia
que estaba sintiendo y toma un respiro.
-Si bueno, está bien. –DongHo rodea sus ojos-
De todas formas, ya estamos aquí.
YangMi respira con alivio al ver que DongHo
cedió sin hacerle más reclamos a su padre, de lo contrario; la situación
hubiera sido demasiado incomoda.
-Chicos, -la novia del señor Kang los llama- ¿Pueden
venir a la cocina por favor?
---
Al mismo tiempo en un bar de hongdae:
-Al parecer el equipo de raperos del lado sur
no tiene sus integrantes completos. –señala el MC del evento- Y ya que esto es una
batalla uno a uno; O el equipo del lado norte renuncia a dos integrantes para
hacerlo equitativo o la batalla no se da.
-¡¿Por qué tenemos que renunciar a nuestros
integrantes?! -reclaman al unísono y con
gritos los raperos del lado norte.
-¡Dejen de pelear como niñitas y denle inicio a
esto! –reclama alguien del público- No pague una entrada para ver a estas gatas
agarrarse a arañazos.
-¡Cállate imbécil! –Reclama uno de los raperos
del lado norte al individuo del público.
-¡Estos idiotas deberían perder por ausencia!
–Sugiere otro rapero del lado norte.
-¿Ausencia? –SungMin sube al escenario con una
gran sonrisa- ¿Quién está ausente?
-¡Llegan tarde par de idiotas! -reclama Han YoHan
-Ya lo sabemos –Ríe ByungYoon uniéndose también
en el escenario- ¡¿Vamos a rapear o qué?!
Seguir leyendo
Comentarios
Publicar un comentario