Al
llegar a la casa de DongHo, YangMi toca el de e la puerta timbre insistentemente.
DongHo
abre la puerta. -Vaya que estas ansiosa por drogarte –sonríe
YangMi
sisea con un dedo en su boca mientras se adentra en la casa. -¡Shh!
-Tranquila,
no hay nadie –sonríe cerrando la puerta- claro, sigue con toda confianza, estás
en tu casa –viéndola como se ha ido a prisa hacia el segundo piso.
-¿Qué
te pasa? –DongHo llega a su habitación en el segundo piso- ¿Has cometido un
crimen?
-Estoy
nerviosa -camina de lado a lado en la habitación de su amigo
-Se
nota –él ríe- tranquila, calmaremos esa ansiedad
DongHo
busca en su armario y saca una caja para ponerla sobre su cama, abre dicha caja
y saca una pipa, mete la mano en su mochila sacando la bolsa plástica con
marihuana que compraron hace unas cuantas horas. Se dispone a abrir la bolsa
plástica, pero YangMi lo detiene.
-Espera
-¿Qué
pasa?
-No
se… no sé si deba hacer esto aquí… en tu habitación… no hay nadie… -baja su
mirada
DongHo
pone sus ojos en blanco para luego hacerle una mueca. –¿Crees que podría
violarte o algo así?
-No
dije eso… bueno es que bajo los efectos de la droga… no lo se
-Pequeña
–le pone una mano en la cabeza- esta no es mi primera vez, se controlarme,
además, seguro serías tú la que quiera violarme a mí –ríe
-Tonto
-le hace una mueca
-¿Acaso
dudas de mí?
-Claro
que no –ella le sonríe
-Bien,
pues no se diga más -saca una mota de la bolsa, la acomoda dentro de la pipa y
toma un encendedor que también estaba en su mochila, ofrece la pipa a su amiga.
–Vamos a darnos un buen viaje –sonríe
-¿Viaje?
-Tu
solo has lo que te digo. Absorbe mientras yo lo enciendo ¿Vale?
-Si…
-dudosa pone sus labios en la pipa y sigue las indicaciones de su amigo. De
pronto tose desesperadamente
-Bien
bien, mi culpa –le da golpecitos en la espalda- se me ha olvidado decirte que
no tragues el humo –estalla en risa
-¡No
es gracioso! -continúa tosiendo
-Solo
dale otro sorbo –vuelve a ponerle la pipa en los labios- y mantén el humo por
unos segundos en tu boca… -mira como ella lo hace- bien bien y luego lo
suetas… -ella bota el humo- ¡Perfecto! No
ha sido tan difícil ¿Cierto? -el festeja
-Bueno…
-tose ligeramente- No siento nada diferente
-Tu
tómalo con calma -él sonríe- ya ira haciendo efecto… -le da una fumada a la
pipa y se la vuelve a ofrecer a ella- venga, dale otra fumada, trata de que sea
más profundo esta vez.
Minutos
después YangMi empieza a sentirse somnolienta, es como si sus parpados pesaran
más de lo normal, su cuerpo se siente tan ligero, como si flotara y una sonrisa
poco a poco se empieza a dibujar en su rostro, siente la alfombra peluda del
piso con su pies descalzos y de repente se acuesta sobre esta.
-Tu
cama se siente tan suavecita –ella rueda sobre la alfombra del piso
-Si
claro… la cama… -él le quita la pipa de las manos y la deja sobre su escritorio
para acostarse también en el piso junto a YangMi.
-No
des tantas vueltas, no quiero que vomites en mi cama –ríe burlón ya que es
consiente que están en el piso. Él no ha fumado tanto como ella.
-Siento
como si… -empieza a abrir sus brazos y piernas- estuviera sobre la nieve…
nieve… vamos a hacer un muñeco de nieve -se sienta- ¡¿Si?!
-Después
–la jala de la mano haciendo que se acueste de nuevo- quiero mostrarte algo
–señala al techo- ¿Ves eso?
-¡Oh!
Las estrellas. –se sienta de golpe de nuevo- demonios, ¿Ya anocheció? Tengo que
estar en la biblioteca, mi padre ira a recogerme
-Tranquila
-el ríe y la jala de nuevo haciendo que se acueste, esta vez sobre su brazo-
solo es pintura, afuera aún no se pone el sol
-¿Pintura?
-Si,
lo hice yo
-¿Trajiste
las estrellas tu solito? -gira su cabeza
para mirarlo y sonríe
-Claro
que no -el ríe- me refiero a que lo pinte yo
-¡Claro
que lo sabía! –ella ríe- te estaba tomando el pelo
-Si
claro -el ríe y le da un golpecito en la cabeza
-Y
ese es el sol… -señala- estoy drogada, pero sé que es imposible que, entre el
cielo oscuro lleno de estrellas, esté el sol –ríe- eres raro ¿Por qué pintaste
eso?
-Bueno,
estaba drogado cuando lo hice –el ríe- además, podría ser una vista desde el
espacio, así se verían las estrellas y el sol
-Pero
ahí hay nubes –ella refuta señalando
-Si,
bueno… -el ríe- podría pasar como algo de arte astrato…
-Abstracto
–corrige ella
-Sí,
lo que dijiste
-Pero
es muy bonito, estrellas y el sol... el sol… -cubre su rostro con una mano-
hace mucho sol… mucho calor… -se sienta- tengo mucho calor- se quita su suéter
-Oye
YangMi, espera -él se sienta también
-¿No
tienes calor? –se abanica con sus manos- hace mucho calor –de repente se quita
su blusa sin ningún reparo y se arrodilla llevándose las manos al pantalón
-¡Wow!
Okey okey, suficiente -ríe DongHo y la detiene cuando empezaba a soltar los
botones de su pantalón
-Abriré
la ventana si tienes calor –DongHo se levanta y abre la ventana
YangMi
se pone de pie y empieza a dar giros torpemente, DongHo recoge la blusa del
piso.
-Ponte
esto –extiende la blusa
-Todo
da vueltas DongHo -ella no para de reír
-Sí,
deberías dejar de girar -el ríe y la atrapa deteniéndola por los hombros
-¡Déjame!
Quiero girar en el carrusel -lo empuja, él pierde el equilibrio cayendo hacia atrás
llevándose a YangMi consigo
-Momento
de bajarse del carrusel -DongHo bromea y se mueve para quitársela de encima,
pero ella no pretende hacerlo.
YangMi
sube más su cuerpo acomodándose a horcajadas sobre él y le sonríe mientras se
va acercando poco a poco a su rostro.
-Yang…Mi…
pequeña… ¿Qué haces? –algo nervioso pero sonriente
-Siempre
me dices pequeña, pero tenemos la misma edad
-Pero
tu estatura… -él sonríe e interpone la mano en la que aun sujetaba la blusa-
creo que debes ponerte tu blusa…
-No
quiero –toma la blusa y la lanza lejos para volver a acercarse al rostro de su
amigo- Dime DongHo, ¿No te gusto ni un poquito?
-con su dedo empieza a acariciar el rostro de su amigo
-Claro
que me gustas. Como amiga -él sonríe retirando la mano que lo acariciaba
-¿Por
qué solo como amiga? -ella hace un
puchero y toma la mano de DongHo entrelazando sus dedos para atraparlo mientras
ladea su rostro.
-Pequeña,
creo que será mejor que te quites de encima de mí. -ve como ella toma su otra
mano de igual forma para aprisionarlo por completo en su agarre- En realidad no
sabes bien lo que estás haciendo, es el efecto de la…
YangMi
ejerce presión sobre las manos de DongHo contra el colchón, sonríe ligeramente
sacando su lengua ligeramente para humedecer sus labios y sin esperar un
segundo más baja su rostro hacia el cuello de DongHo besándolo y succionando
piel.
DongHo
se debilita a tal ataque en su cuello, sus ojos se cierran y suelta sus manos
para llevarlas hacia el cuerpo de YangMi, toca su delgada cintura y se desliza
lentamente hasta sus caderas, la dirige en un movimiento ondeante que roza con
su…
-¡Espera
YangMi! -él de repente abre sus ojos y la toma por los hombros para apartarla
hacia un lado de la cama. Se levanta a prisa de la cama algo agitado. –Cuando dije que quizá serías tú la que me viole,
no pensé que pasaría esto- ríe nervioso, toma la blusa del piso y se dirige a
ella.
-No
quiero… hace calor –ella rechaza la blusa y continúa acostada en la cama
-Pues
lo siento –la jala del brazo haciendo que se siente- soportaras el calor -Le coloca la blusa por la
cabeza- será mejor que te vistas porque soy tu mejor amigo, pero también un
hombre, y no quiero hacer algo de lo que me voy a arrepentir y tú ahora mismo…
–mira el pecho de su amiga y desvía rápidamente la mirada- no sabes lo que haces
–toma la mano haciendo que la pase por la manga de la blusa. –Bien, así está
mejor -la ve de nuevo recostarse sobre
la cama- iré por algo de agua. No hagas nada
Ella
ríe mientras rueda en la cama hasta que cae al piso, DongHo baja al primer piso
y llena un vaso con agua fría, lo bebe a prisa como si hubiera pasado sed el
día entero, se queda un momento inmóvil y sonríe ligeramente llevando su mano
al cuello en la zona que YangMi beso y succionó tan apasionadamente. Sacude su
cabeza forzándose a sacar esos pensamientos de su mente, abre el chorro de agua
del lavabo y mete sus manos para recoger un poco de agua, moja su rostro y toma
un respiro, cierra el grifo y toma el vaso de nuevo, lo llena con agua del
dispensador y va de regreso a su habitación.
-YangMi… -él la ve en el piso intentando arrancar con
sus dientes la felpa de la alfombra- Oye, eso no se come –deja el vaso sobre el
escritorio y la levanta para luego sentarla sobre la cama.
-Este
es el peor algodón dulce que he probado en mi vida -saca con sus dos manos las pelusas
de su lengua
DongHo
no puede evitar reírse de su amiga mientras dirige el vaso con agua a la boca
de ella ayudándola a beber con cuidado, YangMi pone sus manos sobre las de él
para hacer que le retire el vaso de la boca.
-Tus
manos son tan grandes… -ella analiza una
de las manos de él mientras la mide con su mano que, a relación; es mucho más
pequeña
-Tienes
manos de niña -el ríe mientras deja el vaso que sujetaba en su otra mano sobre
la mesita junto a su cama
Ella
le hace un puchero y suelta la mano de DongHo para lanzarse sin reparo hacia
atrás recostándose en la cama.
-DongHo
-ella pregunta mientras mira hacia el techo
-¿Qué? -se recuesta junto a ella mirando en la misma
dirección
-¿Crees
que todos tenemos un alma gemela?
-¿Qué?
-Es
decir, una persona que es perfecta para estar contigo
-Claro,
tu eres perfecta para ser mi amiga
-Tonto
-hace una mueca aun mirando hacia el techo- me refiero a una pareja
sentimental, alguien a quien amar y que te ame
-Yo…
-la mira- no lo creo
-¿Por
qué no lo crees? -gira su rostro hacia
él y lo mira
-Pues
veras…
---
Un
par de horas después de una profunda platica, los dos atacan el refrigerador
con hambre voraz.
-Umm…
-ella habla con su boca llena- esto esta delicioso
DongHo
ríe mientras prepara algo en una pequeña olla. –Mastica bien, vas a
atragantarte
-Nunca
pensé que un simple sándwich pudiera saber tan delicioso -da otro mordisco- ¡Que
hambre! ¿Por qué tengo tanta hambre?
–sonríe y parece ansiosa
-Es
un efecto secundario -él sirve en una taza el líquido humeante- bebe esto -le
entrega la taza
-¿Qué
es? –ella acerca la taza a su nariz para olfatear- ¡oh! Chocolate -sonríe y sopla para luego
darle un sorbo- ¡Ah! Esta muy dulce -se queja y deja la taza sobre la mesa
-Bébelo,
le puse bastante azúcar para que te repongas, aun pareces algo ida y ya no
queda tiempo para esperar a que se te pase
-¡Es
verdad! -se lleva sus manos a la cabeza-
mi padre me retirará en la biblioteca
-Exacto,
hay que darse prisa, bébelo mientras yo llamo un taxi -pone el teléfono a su
oído- Podría llevarte, pero soy responsable. No conduciré drogado
Ella
pone sus ojos en blanco. –¿Hablas de conducir tu bici?
Él
responde con una gran sonrisa. –Si
-Me pregunto si la más drogada soy yo o tu
–bebe de la taza
-Oh, si –Él habla por teléfono- por favor envié un taxi a la dirección…
---
Al
llegar a la casa, la pareja prepara con apuro unos cuantos globos y
serpentinas.
-Cariño
¿No te has dado cuenta de la hora?
-¿Qué?
Su
esposa sonríe de nuevo amablemente. –Cariño, ve y toma un abrigo para la niña
que hace frio fuera y no se llevó más que un suéter.
-¡Ah!
-mira su reloj- Es hora de ir a retirarla de la biblioteca -se apresura a subir las gradas
-También
lleva un paraguas –la esposa grita desde abajo- puede que llueva
Lee
YoongSo enciende su auto para sacarlo del garaje a las siete pm como cada día
para ir a recoger a su atesorada hija de la biblioteca, le toman veinte minutos
llegar y su niña esta como siempre esperando en el mismo lugar.
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