Capítulo 6: Aquella chica misteriosa (I)

HR: Ya que es verano sería raro usar esa chaqueta de cuero, por eso la guarde en el closet, cuando cambiemos de estación puedes guardar ahí los vestidos de verano y los shorts y usar esa ropa, es térmica, muy buena para el invierno. ¿Ya viste el cuarto de baño?

DJ: Si…  -trata de esconder su contento-  

HR: Pero seguro no viste… sígueme  -sonríe y la toma de la mano-

DJ: Puedo… puedo caminar sola  -trata de soltarse pero no con mucho esfuerzo-

HR: Prepare esto para ti  -Entran al baño, se dirige al tocador. Abre un cajón-

Ante los ojos de DJ estaban tantos cosméticos que parecía un mostrador de tienda: sombras para ojos, rímel de pestañas, delineadores, labiales, pestañas postizas, base en polvo, liquidas, rubor, correctores de ojeras y sets de brochas.

HR: No sabía que es lo que te gustaría así que compre algo de cada cosa

DJ: -Trata de endurecer su rostro- Si, como sea… gracias –se aclara la garganta incomoda- y como… como debería llamarte… ¿Madrastra? No se…

HR: No te preocupes, tomate tu tiempo para ponerte cómoda, puedes llamarme HyoRin si lo desea

DJ: ¿Qué edad tienes? Luces obviamente más joven que mi papá

HR: -sonríe-  Tengo 37

DJ: Y mi padre tiene… 46, entonces hay 9 años de diferencia entre ustedes, eso es bastante

HR: Haces cálculos muy rápido  -sonríe-  bueno si son 9 años pero en el amor no importa la edad

DJ: -hace una mueca-  que cursi, bien, podrías… dejarme sola, quiero cambiarme y dormir un poco

HR: Si claro, casi se me olvida  -salen del baño-  te traje unas galletas con leche

DJ: -Pensó: “Galletas con leche ¿acaso soy una niña?”-  Si, gracias

HR: Tu padre suele salir muy temprano al trabajo por lo que ¿Podrías levantarte para desayunar juntos antes que se vaya?  -se para ya fuera de la puerta-

DJ: ¿Por qué tendría que desayunar con él? Me indigestaría, no gracias, sigan su vida de luna de miel, no molestare

HR: -Expresión triste- Ah… bueno… pero aun así... si quizá despiertas temprano… estaremos en el comedor. Que tengas buena noche, si necesitas algo pídeselo a las empleadas.                                       

DJ: Si, gracias  -cierra la puerta-

Como toda adolescente de 16 años a DaeJi le llamaba la atención todas esas cosas, ropa, maquillaje pero no pudo tenerlos, ni regalos de cumpleaños o navidad, su vida fue muy dura y ahora está en ese palacio, se paró en medio de la habitación y miro alrededor, está contenta, tiene todo lo que nunca tuvo pero… de repente recuerdos de su anterior casa, el maltrato de su madre, la mirada lujuriosa de los hombres ante su curvilíneo cuerpo, Joseph… todo eso regresa a su mente y la hace sentirse mal, nunca llora pero desfoga todos esos sentimientos reprimidos en ira, aprieta sus puños y dientes y empieza a respirar más rápido, desde niña era agresiva hasta que conoció a Amy, quien le ayudo a enfocar su ira en otras cosas, la música y algo de artes marciales y defensa personal, ahora está en uno de sus momentos de ira y necesita desahogarse, de pronto recuerda; “¿Mi guitarra?”

La había dejado en el primer piso, en el comedor, abre la puerta y camina a prisa por el corredor alfombrado pasando puerta tras puerta de las habitaciones, baja las gradas y en el primer piso todo está a oscuras y de repente ve una sombra, no es una chica asustadiza pero se queda paralizada, la sombra continua aproximándose hacia ella haciéndola retroceder, choca de espaldas con algo, un estruendo en el piso al romperse un jarrón de porcelana despierta a quienes ya estaban durmiendo.

XX: Señorita, ¿Está bien?  -dice una voz saliendo de la sombra-

XX: ¿Que paso?  -Se enciende la luz-

Resulto que la sombra que se movía era una de las empleadas y al escuchar el ruido otra empleada vino corriendo y encendió la luz, DaeJi empieza a reír, reía de sí misma, había pensado por un instante que podría tratarse de un fantasma, las empleadas se miran entre sí sin comprender porque la adolescente se ríe.

HR: ¿Que paso?  -baja las gradas asustada-

XX: Señora… creo que asuste sin querer a la señorita… acababa de limpiar la cocina y apague las luces, la señorita apareció y –sonríe-

DJ: Pensé que era un fantasma  -ríe-

HR: ¡Fantasma! ¡No! –asustada-

XX: Lo lamento, es mi culpa, limpiare esto

DJ: Lastima que no fue un fantasma, esto se habría puesto interesante  -toma su guitarra y se va-

HR: Limpien eso por favor

XX: Si señora –las dos empleadas responden al unísono-

HR: DaeJi…  -corre ligeramente tratando de alcanzar a DJ-

DJ: ¿Qué?  -continúa caminando-

HR: Si necesitas algo, puedes presionar el control remoto que esta sobre tu velador y una de las empleadas vendrá a tu habitación

DJ: ¿Si?  -llega a su habitación y se para en la puerta-

HR: Si  -sonríe- no necesitas levantarte en medio de la noche

DJ: Si… lo recordare  -va a cerrar la puerta-

HR: Por cierto… mañana iré a retirar a amor de la veterinaria

DJ: ¿Perdona?  -no entiende-

HR: -sonríe-  ¿Tu padre no te lo ha dicho?  Tenemos un cachorro, se llama amor

DJ: ¿Amor?  -se burla-

HR: Se torció su patita por saltar de la grada y lo dejamos en la veterinaria, mañana lo retirare, ¿Quieres acompañarme?

DJ: No  -dice secamente-

HR: ¿No te gustan los cachorros? Si te quedas aquí estarás sola

DJ: No lo sé, pero mañana quiero explorar este barrio de riquillos, y ¿Sola? ¡Ja! Toda mi vida he estado sola así que no hay diferencia

HR: Ah…  -triste- de todos modos, si te animas… iré a las 10am

DJ: Si como sea  -cierra la puerta-

DJ saca su guitarra del estuche y la pone sobre la cama, va hacia su maleta y saca una caja mediana que es su amplificador, la conecta pero un bostezo sale de su boca, el susto del supuesto fantasma le quito su arranque de ira y ahora el sueño la ha dominado, desconecta su guitarra y como su fuera un frágil tesoro la regresa a su estuche, levanta la sabana de seda de la cama y se acuesta, el colchón es lo más cómodo en lo que jamás se ha acostado DJ y queda dormida de inmediato.

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Cuando DJ abre sus ojos tras rodear varias vueltas en la cama, mira a su alrededor, no había sido un sueño, de verdad está en Corea con su padre, mete su mano bajo la almohada y saca su teléfono, mira la hora, 9:15

“Mi padre ya se habrá ido seguramente” dice estirándose y se levanta de la cama, va al cuarto de baño y ve su desastrosa imagen en el espejo, todo su maquillaje de ojos esparcido, mira entre los cosméticos un limpiador de maquillaje y saca una toallita húmeda, la pasa por uno de sus ojos y se le quita de inmediato la mayoría de maquillaje negro, “Wow~ esto es mejor que restregar con toalla”, se pasa la toallita húmeda por el otro ojo y se mira su rostro casi limpio de maquillaje, “Así que esto es un limpiador de maquillaje, es bueno”  sonríe satisfecha, “Veamos que más hay aquí…”  Toma el enjuague para rostro, pone un poco en su mano como leyó en la indicación y se lava el rostro, seca el agua de su rostro y se mira de nuevo, abre sus ojos sorprendida, ya estaba acostumbrada a que siempre le quedaran restos de delineador negro pero ahora su rostro está completamente limpio, lo que no duro mucho tiempo ya que vuelve a aplicar mucho delineador negro, rímel y sombras negras también, sus labios con un color vino que por poco pasa por negro y suelta la liga de su cabello dejando sueltas las trenzas en el largo cabello, se moja un poco y agachando todo su cuerpo hacia adelante vuelve a armar la coleta de caballo, ata la liga y se mira al espejo, es su aspecto de siempre, había dormido con la misma ropa que llevaba puesta así que tenía olor a sudor, se mete a la tina y se da un rápido lavado de sus partes importantes y sale rápidamente envuelta en una toalla, regresa a mirar la tina de baño; “Tu y yo tendremos un largo y relajante baño esta noche” le guiña a la tina de baño y sale, va a su maleta con mucha paciencia envuelta aun en la toalla y revisa entre la ropa que llevo, la puerta suena.

DJ: ¿Quién?  -pegándose a la puerta-

HR: DaeJi, iré a la veterinaria, ¿Segura que no deseas acompañarme?

DJ: -Lo piensa por un momento. Abre la puerta-  SI iré, pero apenas voy a vestirme, ¿Puedes esperarme?

HR: Siii, claro que te espero, ¿Puedo ayudarte a elegir tu ropa?

DJ: ¿He? ¿Por qué? ¿También piensas como mi padre?

HR: No no, es solo que siempre quise hacer eso, sabes, no tenía muchas amigas ni hermanas, ¿Has visto esas películas donde entre chicas se eligen la ropa, se la prueban, opinan y cosas así?  -suena emocionada-

DJ: No, no lo he visto  -miente, si lo ha visto-

HR: Ah…  -incomoda- Entonces… te esperare… en el comedor

DJ: De acuerdo  -cierra la puerta-

“¿Elegir mi ropa?”  Que le pasa, nadie ha elegido la ropa para mí, dice burlándose mientras revuelve su ropa, escoge un buzo negro de manga larga y cuello en v de tela delgada, en california hace tanto calor como el verano de Corea así que su ropa es perfecta pero todo es negro, siempre lo usa todo negro, nunca uso shorts ya que llama demasiado la atención de los hombres por sus lindas piernas, prefiere los pantalones anchos con bolsillos aunque anticuados es su estilo que esta entre el rock y el hiphop, es algo raro pero a ella le gusta y nunca le importa si la critican, se pone el pantalón de cadera que se abotona bajo su ombligo, a través de su piel se nota el abultamiento por sus huesos de la pelvis, es bastante delgada, se pone un sujetador deportivo con soporte en la espalda y el buzo manga larga, lo recoge haciendo un nudo en su espalda para dejar descubierto su vientre, una contradicción ya que dice no gustarle llamar la atención de los hombres pero le encanta mostrar su delgada cintura y anchas caderas en una silueta de sirena y muestra con orgullo su tatuaje: Una mariposa en el lado derecho de la cadera, que parece estar posada sobre el hueso de la pelvis, se la hizo hace un año cuando sus abuelos se fueron de la casa, expresa su deseo de ser libre, libre del tormento que vivía con su madre, pero ahora ese tatuaje le recuerda a su ex vida, su infierno.

Se mira al espejo y mira su tatuaje, pasa su dedo con delicadeza sobre la mariposa y débilmente escapa de sus labios “Ahora somos libres ¿verdad?”

Sale de la habitación caminando en calcetines, baja al comedor,

HR: Tienes una figura hermosa  -mirándola-

DJ: Lo escucho seguido  -se sienta-

HR: Veo que no tienes pantuflas, comparemos eso hoy, creo que compre tantas cosas y se me olvido lo más importante  -sonríe-  comamos y vamos de compras

DJ: Si  -responde seca-  ¿Dónde dejaron mis zapatos?

XX: Las botas… su padre dijo que las botara…

DJ: ¡Que!

HR: Tranquila, yo les dije que solo las guardaran para que tu padre no las viera

DJ: ¿Por qué? ¿Qué tienen de malo?

HR: Bueno, están algo viejas ya, te comprare unas iguales o puedes usar alguno de los que te compre, ¿las convers te gustan?

DJ: -bebe jugo y aclara su garganta-  Si

HR: Pues si recoges ese pantalón en tu pantorrilla quedaría muy bien con las convers

DJ: -Piensa: “Maldición, tiene razón”-  No, quiero mis botas

HR: De acuerdo, traiga las botas por favor, déjelas en la entrada

DJ: Es incomodo esto de sacarse los zapatos en todo lado, en california andamos con los zapatos por todas partes

HR: Si… es nuestra cultura, pero en la entrada tenemos el armario de zapatos, cuando son limpiados por las empleadas los suben a la habitación y los puedes tener en tu habitación así te pruebas el conjunto completo, ropa –señala- peinado, zapatos, cartera, hay que coordinarlo bien.

DJ: Si no fueras coreana y si tuvieras el cabello rubio serias Barbie  -se burla-

HR: No… no soy superficial, no pienses eso, yo soy diseñadora y muy inteligente he –sonríe y guiña un ojo-

DJ: ¿Diseñadora?

HR: Si, tengo una marca de ropa y una tienda, después del veterinario iremos de compras y después a mi tienda ¿Quieres?

DJ: -brinca de emoción por dentro pero lo disimula-  Si bien, no tengo algo más que hacer

Terminaron de desayunar y ahora HyoRin sale primera para sacar el auto de la cochera, DaeJi salió un poco después, sale cerrando un poco sus ojos por el deslumbrante sol y ve la puerta de la cochera abrirse lentamente para mostrar poco a poco el convertible color rosa de HyoRin, “Maldición, mas rosa ¿Quién se cree? ¿Barbie?”  Murmura entre dientes mientras espera que HyoRin saque el auto.

La puerta de la cochera se cierra despacio automáticamente y HyoRin con sus gafas de sol puestas le hace seña con la mano a DaeJi llamándola a que suba al convertible.

Suelta un suspiro y camina hacia el auto, abre la puerta y sube cerrando la puerta, se gira un poco para jalar el cinturón y le pareció ver algo, más bien alguien en la ventana de la casa contigua.

DJ: ¿Uh?  -mirando a la ventana de la casa contigua-

HR: ¿Qué?

DJ: Nada… me pareció ver a alguien en la ventana de esa casa  -sigue mirando-  pero creo que vi mal

HR: Bien, vámonos  -arranca el auto-

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(En la casa contigua)

En la silenciosa casa de la familia Woo, todas las cortinas están aún cerradas, son vacaciones de verano por lo que los dos jóvenes hijos de la familia no se levantan hasta las 12 del día, pero uno de los dos hermanos, JiSeok el mayor siempre está al pendiente del sonido de la cochera de la casa de junto porque está en su etapa de juventud en la que no hace más que pensar en mujeres y la vecina le atrae a pesar que es una mujer mayor, casada y embarazada, se levanta de un brinco de la cama al escuchar el sonido de la puerta eléctrica de la cochera abriéndose y se acerca a la ventana como un león acechando a su presa, mira entre la cortina a la causante de sus fantasías; HyoRin, “Esta preciosa hoy” piensa mientras la mira entrar a la cochera pero alguien más ha salido de la casa, pone atención y ve la silueta de sirena de una joven que nunca había visto antes, pasa saltando por su cama para salir de su habitación y entra a prisa en la habitación de alado tirándose bruscamente a la cama de JiHo, su hermano menor.

JiSeok: ¡JiHo! ¡Despierta! ¡Despierta!  -sacudiéndolo sentado sobre él-

JiHo: ¡¿Qué pasa?!  -asustado, alarmado, sorprendido-

JiSeok: La vecina, la vecina…  -ríe como loco-

JiHo: -Lo empuja- Te dije que dejaras de espiarla, te descubrirá uno de estos días  -se vuelve a acurrucar en su almohada-

JiSeok: No, hay otra chica, levántate  -le quita su almohada y se la lanza-

Se acerca a la ventana para continuar viendo y ve a la chica subirse al convertible, JiSeok está muy emocionado y por un pequeño descuido desliza un poco más la cortina, la chica regresa su mirada hacia él y de inmediato se tira al piso con sus excelentes reflejos, empieza a arrastrarse hasta la cama ayudándose con sus codos en modo militar y no para de reír, su corazón late con fuerza y llega a la cama, su hermano menor le lanza la almohada.

JiHo: Se dio cuenta ¿Verdad?  -dice con un bostezo-

JiSeok: No, pero la otra chica…  -sonríe como un tonto y se lleva su mano al pecho-  ag~ se me va a salir el corazón

JiHo: ¿Qué te pasa? –lo mira extrañado pero riéndose de su hermano-

JiSeok: Debiste verla JiHo, es una sirena, es… su figura es…  -hace una silueta de mujer con sus manos-  aggg~  -muerde su puño emocionado-

JiHo: Está embarazada  -frunce su seño- ¿Qué silueta?

JiSeok: ¡No! La vecina no, la otra chica, despierta JiHo, te digo que había otra mujer

JiHo: Quizá estás viendo doble  -se acuesta-

JiSeok: ¿Quién podrá ser? ¿Hermana de la vecina?

JiHo: Quizá es su hija  -se ríe burlón-

JiSeok: ¡No! Es demasiado joven como para tener una hija tan crecida, te lo digo enserio, su figura es… ¡wow! Y su estilo… es algo que no he visto antes  -sonríe con su miera perdida-

JiHo: Necesitas una novia  -riéndose ruidosamente-

JiSeok: Tengo que estar preparado para cuando regrese  -se levanta y sale corriendo de la habitación-

JiHo: Preparado… que le pasa… -ríe- mi hermano ha enloquecido finalmente

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