Apenas ayer me había dicho que aceptaba el hecho que solo lo viera como hermano y empezaba a comportarse como tal pero ahora ha regresado nuevamente a ser el idiota egocentrista mujeriego de siempre, además esta ebrio lo que potencia a mil su estupidez y yo que no había bebido mucho estoy siendo seducida por ese mismo idiota que tanto odio, como puedo decirles a mis hormonas que se calmen.
Además… Jung esta justo alado, que haría si se despierta y me ve en esta situación… debo apartarlo de mí aunque mi cuerpo masoquista me diga que me rinda ante él.
• Me estas lastimando -le dije y casi lloraba, en realidad me duele-
• Ah… tu brazo… perdón perdón -me soltó-
• ¡Eres un salvaje! –Me toque el brazo en la parte de la herida-
• Lo lamento de verdad, déjame ver…
• ¡No! ¡Solo apártate de mí! -solté las lágrimas que había estado conteniendo-
• Lo lamento…
• ¡Hasta cuando tengo que soportar que me lastimes!
• ChaeRi discúlpame, no recordé tu herida…
• ¡No me refiero a la herida!
• ¿He? Enton… entonces… a que…
• ¡Solo piensas en ti! Dices que te gusto, que me quieres y eso es lo único que te importa, ¿No te importa lo que pienso yo?
• Claro que me importa, pero tú no lo admites, sigues diciendo que no cuando sabes perfectamente que si
• ¡Bien! ¡De acuerdo! ¡Me gustas! ¿Y eso importa? ¡Nunca te importo! Ahora no quiero estúpidas ilusiones contigo, ¡sabes cuánto tiempo he vivido pensando en ti!
• ¿Pensabas en mí?
• ¡Si! Desde hace muchos años atrás vivo pensando en ti, ¡Gracias a ti no he podido ser feliz con nadie!
• ChaeRi yo…
• ¡Quítate! -lo empuje-
• Si dices que me quieres entonces no me apartes de ti
• Quiero apartarte de mí, ¡Tu solo traes desgracias a mi vida!
-Narra Gray-
“¡Tu solo traes desgracias a mi vida!” Esas palabras me rompieron el alma en dos, es mi culpa la herida que tiene en su brazo, es mi culpa la marca que tiene en su vientre, estoy algo mareado por el licor pero lo suficientemente consiente como para comprender todo lo que me está diciendo ChaeRi, finalmente sus reclamos llegan a mí.
• Lo dices por las cicatrices… -señale su abdomen-
• Nunca lo dije pero si no hubieras atorado tu maldito avión a control remoto en ese árbol… no, si no me hubieras hecho subir al árbol para que lo recuperara… -la vi tan sentimental, no podía hablar más y se echó a llorar-
• Es mi culpa, tienes razón, yo debí subir al árbol para recuperar mi avión, me he arrepentido de eso cada día
• ¿Me sirve de algo tu arrepentimiento? Por lo menos debiste disculparte, ¡Pero tú solo me evitaste después de eso!
• ¡Porque me sentía culpable!, estuve cada día en el hospital mientras estabas en coma, ¡cada día por 3 meses!
• ¿Estuviste? -se sorprendió-
• Si, estuve cada día ahí, quien crees que te cuido y te limpio las heridas, ¡yo!
• Pero… pero, cuando desperté… ¡No mientas! Le pegunte a la enfermera y dijo que nadie a excepción de mis padres me visito y mis padres estaban algo molestos porque tú no apareciste después de eso
• ¡Casi pierdo el año escolar por faltas!
• Eso era porque te escapabas a las salas de juegos, ¡tus padres le contaron a los míos!
• Eso era lo que les decía, pero en realidad iba al hospital a cuidarte, quien más lo haría si tus padres trabajan tanto
• Claro que tenían que trabajar ¡Para pagar la cuenta del hospital!
Supe que tenía que detenerme cuando su llanto se volvió más desesperado, fue mi culpa que ChaeRi subiera al árbol, yo le pedí que lo hiciera por mi miedo a las alturas, una rama se rompió y ella cayo desde muy alto provocándose varias heridas y un golpe en la cabeza que la dejo en coma por 3 meses, nuestros padres preguntaron que había pasado y yo solo dije que se había caído, que no sabía porque había subido, fui un cobarde y no tenía el valor para verla a los ojos, por eso la cuide sin que supieran nuestros padres y cuando vi su dedo moverse salí corriendo de la habitación del hospital para llamar a la enfermera y le pedí, como todos los días, que no le dijera a nadie que yo iba a cuidar a ChaeRi todos los días, ahora sé que la enfermera en realidad guardo el secreto.
• Y la herida que tienes en el brazo también es mi culpa, lo lamento
• ¡Si! ¡Pues déjame en paz! ¡No vuelvas a acercarte a mí!
Quería abrazarla para que parara de llorar pero no podía por la culpa, no había pensado en su brazo y la forcé, quizá si le hago daño cada que intento acercarme, salí de la habitación y del apartamento, me fui a la azotea, necesitaba algo de aire.
-Narra ChaeRi-
No estaba consiente de todo el rencor que le tenía a SungHwa y se lo acabo de decir, ahora no sé qué es lo que pasará entre él y yo, es como si la historia llegara a su fin, pero siento que esto no es más que el inicio y todo lo que os acabo de contar es solo la introducción.
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