Enfermo
–HyukWoo
come un poco más –pidió SamD preocupado–. Estás pálido, me preocupas.
Loco
sonrió débilmente, en realidad algo le pasaba, estaba desanimado, todos
comieron con ansias ya que desde la mañana no habían comido nada, pero Loco
apenas tomaba los palillos para llevarse un bocado a la boca y masticaba
lentamente.
–¿Te
sientes bien? –cuestionó ______.
–Estoy
bien, es solo que no tengo mucho apetito, eso es todo.
______
tomó un pedazo de carne con los palillos y se lo ofreció a Loco, él se negó,
pero ella insistió hasta que él abrió su boca para comer.
–Hacen
que me dé escalofríos –murmuró SamD con la boca llena–. Quiero arrancarme los
ojos.
–¿Qué?
–cuestionó ______ confundida.
–Dejen
la meloseria para cuando estén solos –refunfuñó en respuesta.
–KiSeok
hyung di aaa –Gray le ofreció un bocado a SamD.
Todos
rieron por la ocurrencia de Gray, SamD abrió su boca y comió sonriente. Al
terminar de comer todos salieron y regresaron a AOMG, Jay insistió en que Loco
se fuera a su casa a descansar y dejando su guerra contra ______ también le
dijo que fuera con Loco y lo cuidara. Obediente a conveniencia, ella tomó la
mano de su novio y se dirigieron hacia el estacionamiento al auto de Loco.
Durante
el trayecto ella no paraba de preocuparse y ponerle atención a su novio hasta
que llegaron y tras dejar el auto en el estacionamiento, se dirigieron al
elevador del edificio donde Loco presionó el número trece, las puertas se
cerraron y empezaron a subir, al detenerse el elevador las puertas se abrieron
y ambos salieron dirigiéndose hacia la puerta de enfrente, Loco levantó la tapa
del panel numérico de la cerradura donde digitó su clave, la puerta se abrió y
entraron.
______
miró alrededor, el apartamento era amplio con una enorme TV frente a un sofá
que lucía muy cómodo. Loco se quitó los zapatos sin decir nada y se dirigió a
su habitación, ella también se quitó sus zapatos y lo siguió.
Él
se quitó la gorra y su chaqueta, se recostó con cuidado en la cama y ______ notó
que él estaba adolorido por los golpes así que se acercó cuidadosamente
sentándose junto a él al filo de la cama, él se movió con cuidado para darle un
poco de espacio y ella se sentó más cómoda.
–¿Te
sientes muy mal? –cuestionó ella poniendo su mano sobre el pecho de su novio.
–Solo
estoy cansado –respondió él débilmente con los ojos cerrados–. No he dormido mucho.
–Los
golpes… ¿Te duele? ¿Dónde te duele?
–En
este lado es donde me duele más –señaló su costado derecho.
______
posó su mano en la frente de su novio con cuidado, se sentía muy caliente.
–¡Tienes
fiebre! Debemos ir al hospital… o debo ir a comprar algo de medicina.
–En
el cajón hay medicina para la fiebre –él señaló.
_______
se levantó de inmediato y abrió el cajón que Loco había señalado, buscó entre
las cajas de medicamentos uno para la fiebre y se apresuró a la cocina para
tomar una botella con agua y regresó a la habitación, le dio la medicina a Loco
para que se la tomara y al recostarse Loco soltó un gemido de dolor.
–¿Fingiste
estar bien? ¿Por qué no dijiste que te dolía tanto?
–Ya
causé demasiados problemas como para hacer que se preocupen por mí.
–Si
fue por mí… yo tengo la culpa. ¿No les dijiste lo que pasó conmigo?
–Para
que decirles, en nuestra relación somos tú y yo –cerró sus ojos y musitó–. Ahora
estamos bien ¿Cierto?
–Si
¿Tienes mucho sueño?
–Si…
un poco…
–Duerme,
me quedaré un rato cuidándote.
Loco
cerró sus ojos quedándose dormido al instante mientras ______ no paraba de
comprobar con su mano en la frente de su novio una y otra vez que la fiebre no
estaba bajando, sigilosamente fue a la sala para llamar a Alice.
-Conversación telefónica-
–Hola
hija –respondió Eli.
–¿Mamá?
–Si,
Alice está aquí desde hace unos minutos, ¿ya vienes?
–No
mamá. Hay un problema, HyukWoo está enfermo, tiene mucha fiebre y se acaba de
tomar medicina, pero la fiebre no baja.
–¿Dónde
estás?
–En
casa de HyukWoo.
–¿Solos?
–No
pienses cosas raras mamá. Lo acompañé porque no se sentía bien y ahora mismo
está con fiebre ¿Qué hago?
–Bueno…
¿me estás diciendo la verdad?
–Si
mamá, créeme.
–Bueno…
ponle una toalla húmeda en la frente y cuello.
–¿Cómo
compresas?
–Si,
pero si no le baja la fiebre será mejor ir donde un doctor.
–Si
no se le baja pronto con las compresas, lo llevaré al hospital.
–Entonces
supongo que vendrás más tarde, ¿qué hago con Alice?
–Pásamela.
–¿Qué
pasó?
–Discúlpame
Alice, pero no poder ir, después te cuento.
–Está
bien no te preocupes.
–Gracias
por entender, debo irme, adiós.
-Fin de la llamada-
______
buscó una toalla pequeña para mojarla y ponérsela en la frente a Loco, pero cuando
fue a la habitación, Loco estaba pálido, sudaba mucho y estaba frío, ella se
asustó tanto que sin pensarlo mucho sacó su teléfono, miró la pantalla y en sus
contactos y marcó al primero de ellos: Arrogante, así había guardado el número
de Jay, desesperada caminaba de aquí a allá esperando respuesta y cuando Jay
atendió le contó de inmediato lo que sucedía, no pasaron más de treinta minutos
y Jay llegó con un médico que revisó a Loco y le inyectó un antibiótico y
analgésico. Afortunadamente se trataba de un resfriado, pero dado que Loco solo
había bebido licor sin comer bien los últimos días, se encontraba demasiado
débil.
–Asegúrense
de que beba mucho líquido –recomendó el medico dirigiéndose a la salida.
–Gracias
doctor –agradeció Jay acompañándolo.
_______
se había quedado junto a Loco acariciándole la cabeza con preocupación, cuando
Jay regresó a la habitación con intenciones de regañar a ______ se detuvo al
verla tan preocupada por Loco. Recientemente Jay le había declarado una guerra
a ______ caprichosamente tras ser rechazado, pero al verla junto a Loco quien
Jay apreciaba como familia, decidió cesar la guerra.
–El
medico dijo que se pondrá bien tras descansar un poco y el medicamento que le
inyectó le hará bien –explicó Jay con calma–. Asegúrate de que beba mucha agua.
Yo… me iré, solo avísame cuando despierte –salió de la habitación.
–Jay
–ella lo siguió.
–¿Qué?
–Jay volteó.
–Gracias.
–No
me des las gracias, lo hago por mi amigo. Tú solo… cuídalo ¿De acuerdo?
–Si
–ella sonrió levente.
Jay
asintió sin decir nada y se marchó, ______ regresó junto a su novio
arrodillándose junto a la cama para ponerle la mano sobre la frente comprobando
su temperatura, ella decidió esperar un poco hasta ver que Loco se encontrara
mejor para marcharse, pero se sentía un poco cansada y decidió cerrar sus ojos
por tan solo un momento, sin embargo, se quedó dormida profundamente sin soltar
la mano de su novio y en aquella incómoda posición.
Horas
después, Loco despertó y al moverse notó que algo le impedía mover su mano,
regresó su mirada para encontrarse con su novia sujetándole la mano y
profundamente dormida con su cabeza sobre el colchón, pero su cuerpo fuera de
la cama.
–_______
–susurró Loco moviendo suavemente su mano.
Él
insistió, pero ella no despertaba así que él se levantó sigilosamente para
cargarla en brazos y acomodarla en la cama, ella continuó sin despertar y
simplemente se acurrucó. Dejándola cómoda en la cama, él se dirigió a la cocina
para beber agua y al volver contempló por un momento a su novia, sonrió como un
tonto y apagó la luz para luego entrar en la cama deslizando cuidadosamente su
brazo bajo el cuello de _______ y la abrazó.
______
se movió un poco y respiró el delicioso aroma de su novio que la llamó a
acurrucarse en su pecho.
–¿Dónde
estoy? –cuestionó ella confundida y adormilada apartando su rostro del pecho de
su novio.
–En
mi habitación.
–Oppa,
¿Te sientes mejor?
–Si.
Ven aquí –él la abrazó acercándola de nuevo a su cuerpo–. Sigue durmiendo.
–Tengo
que… tengo que irme, mi madre… ¿Qué hora es?
–Será
la una de la madrugada.
–¿Como
es que llegué a la cama…?
–¿Por
qué te quedaste dormida en el piso? hay tanto espacio en la cama.
–Es
que yo solo quería comprobar que te bajara la fiebre para irme y supongo que me
quedé dormida.
–Estabas
temblando, por eso te metí a la cama.
–Ah…
gracias, pero si ya te sientes mejor… me voy –ella se sentó.
–No
te vayas –él la tomó de la mano–. Aún me siento un poco mal.
–Acabas
de decir que te sientes bien –ella rio levemente.
–Aun
así, quédate conmigo ¿Sí?
Él
jaló despacio la mano de su novia para hacerla recostar sobre su brazo y la
abrazó.
–¿Tienes
frío? –la arropó con la manta y la
atrajo a su pecho.
–No
–ella tomó aire y lo contuvo, intentaba controlar el hormigueo en todo su
cuerpo que le provocaba él.
–Tú
mano está helada –él tomó la mano de ella para llevarla a su pecho.
–No
tengo frío –respondió ella moviendo sus pies con nerviosismo.
–Tiemblas.
–No
es eso –ella intentó controlar sus movimientos involuntarios.
–¿Qué
te pasa?
–Nada…
–Mírame
–pidió él, aunque apenas podían ver sus siluetas en la oscuridad de la
habitación.
Loco
tomó el mentón de su novia levantándole el rostro delicadamente y no le costó
un mínimo esfuerzo encontrar su boca al acercar sus labios y la besó
suavemente. Ella soltó su respiración lentamente cerrando sus ojos entregándose
por completo en ese tierno y dulce beso que poco a poco se transformó a
pasional. Él acariciaba con su mano la cadera de ______ y deslizó la mano
lentamente hasta adentrarse en el suéter, al tener con tacto con la piel ella
suspiró y se aferró a él acariciándole el cuello disfrutando de las caricias.
–Te
quiero –susurró él separándose de los labios de su novia–. Tenemos que
detenernos –rio por lo bajo y retiró su mano traviesa–. Deberíamos dormir.
Él
la volvió a abrazar acariciando su cabeza y rápidamente se quedó quieto,
parecía haberse dormido, al contrario _______ que permanecía despierta e
inmóvil, aquel beso y caricias la habían despertado por completo y provocado,
los pensamientos lujuriosos llenaron su mente y no podía creer que él no
hiciera algo más aprovechando que la tenía en su cama. La respiración de Loco
sonaba más profunda y el calor de su cuerpo era tan confortante que sin darse
cuenta, ella cayó profundamente dormida en brazos de aquel respetuoso hombre.
Una
vez que amaneció, _______ fue la primera en despertar, se encontró a si misma
rodeando con su brazo el torso de su novio y sonrió, estar pegada a él le
resultaba tan cómodo que no quería despertarlo para continuar abrazada a él.
–¿Dormiste
bien? –cuestionó él si abrir sus ojos y se giró hacia ella para abrazarla.
–Si…
¿Y tú?
–Si
–él abrió sus ojos y la miró–. Ha sido una buena noche.
–Tengo
que regresar a mi apartamento, mi madre estará furiosa.
–¿Cuándo
se va?
–¿Por
qué lo preguntas?
–Quiero
que vengas a dormir conmigo cada día.
–No
voy a dormir contigo todos los días –respondió ella ruborizándose.
–¿Porque
no? es tan agradable abrazarte así –metió su brazo bajo la manta y la abrazó
por la cintura recorriendo la espalda en una caricia–. Sentir tu cuerpo junto
al mío…
–Pero…
–titubeó ella nerviosa al sentir su cuerpo completamente en contacto con él
–Me
encanta ver esa expresión en tu rostro –él sonrió contemplándola.
–¿Que
expresión? –ella abrió sus ojos sorprendida.
–Cada
vez que te abrazo o te toco, suspiras y te pones nerviosa, tus mejillas se
ruborizan y tus ojos tienen un brillo.
–¿Qué?
No… Y-yo yo… no estoy nerviosa –ella evitó su mirada.
–“Y-yo
yo” –él la imitó y sonrió–. Eres adorable.
–¿Adorable…?
no piensas que soy un poco… –ella lo miró y se relamió el labio inferior
sutilmente.
–¿Un
poco qué?
–Un
poco… ¿provocativa? –sonrió abandonando su nerviosismo y timidez–. Estoy en tu
cama y estamos solos.
–Ah…
¿entonces quieres que haga algo?
–No
lo sé, tú dime.
Loco
la besó y giró rápidamente poniéndose sobre ella, sin dejar de besarla, la tomó
por las muñecas subiéndoselas a la altura de la cabeza para luego bajar con
caricias por su cuerpo hasta llegar al borde del suéter y abandonó sus labios
para besarle y chupar el cuello mientras adentraba sus manos bajo la ropa
estrujando la piel de ______ sacándole un gemido. Ella respiraba agitadamente y
llevó sus manos hasta la nuca de Loco donde acarició y adentró sus dedos para
dar un leve tirón de cabello, al sentir eso, él soltó aire y se separó de ella
para mirarla, se mordió el labio inferior y tragó saliva, su rostro estaba
ruborizado al igual que el de ella.
–Aún
no –susurró él agitado y se levantó de la cama.
–¿Qué?
–Aun
no es momento para hacer esto, nena. Tú madre estará preocupada.
–¡Es
cierto! Va a regañarme.
–Me
daré una ducha rápida y te llevo.
–No,
tu debes descansar, puedo ir sola.
–Quiero
acompañarte, aunque no me agrada que estés cerca de DongYul.
–¿Cómo
pude olvidar algo tan importante? –ella se puso de pie y tomó las manos de su
novio–. No tienes que preocuparte, yo no me acercaré nunca más a él y por eso
es que me he mudado.
–¿Qué?
–Si,
alquilé un departamento. Mamá me ayudó y ya no tengo que ver a DongYul.
–Eso
me alivia mucho y quiero conocer tu nuevo departamento.
–Es
pequeño pero bonito –ella sonrió.
–No
tardo –él la besó antes de dirigirse al cuarto de baño.
Una
vez que Loco estuvo listo, ambos salieron del edificio y tomaron un taxi ya que
Loco se tomaba demasiado en serio las advertencias del medicamento que le
administraron: No conducir.
Al
llegar al departamento, ______ permanecía muy ansiosa ya que no sabía cómo
reaccionaría su madre después de que no llegara a dormir y se presentara al
siguiente día con su novio. Ella estiró su mano para tocar el timbre.
–¿No
tienes llaves? –cuestionó Loco.
–Si…
es solo que… si mi madre empieza a gritar, desde aquí fuera puedes huir más
rápido.
–¿Qué?
–él abrió mucho sus ojos.
La puerta se abrió…
Nada mal para empezar a verlo con otros ojos ...
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